Gijón cerrará 2022 con más de 3.500 viviendas vendidas, el registro más alto en quince años

Después de tocar techo en junio, los expertos detectan un inminente cambio de ciclo por el impacto de la subida de los tipos de interés, y especialmente del euríbor, sumado a la elevada inflación que está erosionando el bolsillo de los consumidores. Todos estos factores están empezando a enfriar la demanda con una ralentización de las ventas, aún no muy acentuada, en el último cuatrimestre del año. En cualquier caso, el volumen de operaciones en Gijón se mantiene en un promedio de 250 mensuales por un incremento de las decisiones de compraventa antes de que la situación económica se complique más y la financiación siga encareciéndose. Así se desprende del análisis anual -entre el 1 de diciembre de 2021 y el 30 de noviembre de 2022- realizado por la Unión de Inmobiliarias de Asturias y al que ha tenido acceso EL COMERCIO.

Según este estudio, el precio medio de las viviendas vendidas en la ciudad alcanzó los 148.368 euros, lo que supone una bajada de 4.289 euros con respecto a 2021 y de 1.632 euros con respecto a 2020. En comparación con la media asturiana y de Oviedo, en Gijón es superior, pues durante 2022 los pisos en la región se vendieron a una media de 143.781 euros y en la capital a 112.759 euros. Con estas cifras se puede decir que el precio medio del metro cuadrado útil en Gijón se situó en 2022 en 1.953 euros, mientras que en Asturias alcanzó los 1.811 euros por metro cuadrado útil.

Las zonas con la vivienda más cara de Gijón siguen siendo Viesques (3.218 euros el metro cuadrado), El Bibio ( 2.797 euros el metro cuadrado) y el centro (2.517 euros el metro cuadrado). Y las zonas más baratas están en Jove, Contrueces y Pumarín (1.323, 1.153 y 1.144 euros por metro cuadrado respectivamente).

El periodo medio de venta de una vivienda en Gijón fue de 50 días durante 2022. La vivienda de 3 habitaciones sigue siendo la tipología más vendida, si bien las casas de dos dormitorios se venden primero (22 días de media). La compra en Gijón es debida mayoritariamente a destinarse a vivienda (58,8%), pero no es despreciable la dedicada a inversión (17,7%) o a ambas (23,5%). Respecto al comprador tipo, la franja de edad sigue estando en torno a los 43 años.

César Nozal, responsable de la agencia La Playa y uno de los fundadores de la Asociación de Inmobiliarias de Asturias (Asocias), explica que los precios de venta se mantienen apenas sin cambios, a pesar de la tendencia de caída de la demanda desde septiembre, por la escasez de stock en la ciudad. «En 2017 había una oferta activa de 5.000 viviendas y en cinco años se ha recortado un 50% hasta las 2.700 referencias que hay ahora publicadas en los portales web. Al haber una oferta más reducida, los precios se estabilizan», detalla. No hay stock suficiente en este momento en Gijón para abastecer un año entero de demanda.

Las transacciones de vivienda que más se están viendo afectadas por efecto de la inflación son las que quedan entre los 125.000 y 300.000 euros. Así lo atestigua Cristian García Pastrana, gerente de El Sol Grupo: «De 125.000 hacia abajo es producto de perfil de inversor y de 300.000 hacia arriba es comprador de primera residencia con recursos propios que le da mucha prioridad a la vivienda desde la pandemia y busca producto con buenas prestaciones: terraza, jardines, chalés...».