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Yolanda Fernández, la madre de Germán. P. CITOULA

«Germán abre los ojos, pero no logramos conectar con él»

Yolanda Fernández dice que su hijo, que lleva un mes en el HUCA tras la brutal agresión en Fomento, se recupera de forma lenta | Los médicos valoran retirarle el dispositivo de respiración artificial y la sonda nasogástrica. La rehabilitación comenzará cuando pase a planta

PALOMA LAMADRID

GIJÓN.

Martes, 15 de agosto 2017, 01:59

Se sientan junto a la cama de Germán y leen para él. También le ponen música y, casi de manera continua, le hablan. La familia y los amigos del joven brutalmente agredido en Fomento el 14 de julio se esfuerzan por conseguir una señal que les muestre que Germán les escucha. «Abre los ojos, pero sigue sin conectar con el medio, no logramos conectar con él», explicó ayer su madre, cuando ya ha pasado un mes desde que su vida cambió de manera radical a causa de una paliza propinada a Germán por varios jóvenes con una violencia extrema, que postró al joven camarero, de 24 años, en una cama del HUCA.

En ocasiones, el joven responde a estímulos. «Le digo: 'Germanín, mírame' y gira un poco la cabeza; a veces, me coge la mano», cuenta Yolanda. Los médicos que le atienden señalan que es necesario esperar para saber el alcance de las lesiones cerebrales sufridas. Estos días valoran la situación del joven para retirarle el dispositivo colocado mediante una traqueotomía, «porque lleva un día y medio respirando solo». Asimismo, los facultativos valoran la posibilidad de quitarle la sonda nasogástrica mediante la cual recibe alimento para hacer esta operación directamente a través del estómago.

«El apoyo vale mucho»

La rehabilitación de Germán Fernández comenzará una vez sea trasladado a planta. Yolanda se mantiene al margen de las cuestiones judiciales porque está centrada en la recuperación de su hijo. «A mí lo único que me importa ahora es el estado de salud de mi hijo», asegura. Aunque no está al tanto de todos los movimientos judiciales, sí tiene claro que quiere que se haga justicia. «Que paguen por ello, tanto los que están en la cárcel como los que están fuera», sentencia en referencia a los cinco individuos que han sido detenidos hasta el momento.

Tres de ellos se encuentran en el centro penitenciario asturiano: Imad A., nacido en Marruecos, de 19 años; Yeray V. R., gijonés de 20 años; y Rubén Á. H., vecino de El Entrego de 18 años y al que la investigación considera autor del golpe que dejó inconsciente a Germán. Otros dos jóvenes se encuentran en libertad con cargos después varios días internos en el penal: Iván R. G., gijonés de 22, con antecedentes, quedó en libertad provisional el 21 de julio después de un día en prisión. El quinto arrestado, David S. M., recibió la libertad condicional hace dos semanas, después de que el testigo que le había señalado en un primer momento no lo hiciera en una rueda de reconocimiento.

La difícil situación por la que atraviesa esta familia se ve ligeramente atenuada por las numerosas muestras de cariño recibidas en el último mes. «El apoyo vale mucho; es impresionante», apunta emocionada. Un respaldo que le llega de muchas maneras: desde concentraciones en la calle hasta a través de las redes sociales. No obstante, Yolanda lamenta que no todas las personas se acercan a los allegados de Germán con el mismo ánimo de consuelo. De hecho, en uno de los perfiles habilitados en Facebook en apoyo al joven y su familia se han recibido amenazas.

Amenazas

«Hijo de puta escóndete; perra, como te coja, te voy a dejar en la camilla de al lado de tu amigo», decía en uno de los mensajes colgados una persona que se ampara en el anonimato para amedrentar a un amigo de Germán. «Le dije que fuera a denunciarlo porque no se puede consentir», indica Yolanda. La madre de Germán, asimismo, desconoce la identidad del joven citado como testigo en la causa abierta por la brutal agresión al joven en Marqués de San Esteban que no se personó el pasado 10 de agosto en el juzgado.

El juez que instruye la causa volverá a emitir una citación para localizarle, ya que su testimonio podría resultar clave para reconstruir el violento episodio. «Hablé con los amigos de Germán y no es ninguno de ellos», señaló la madre de la víctima.

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