La futura línea circular de Cimavilla tendrá autobuses cada 20 minutos

El concejal de Seguridad Ciudadana y presidente de EMTUSA, José Luis Fernández, anunció ayer, en respuesta a una pregunta de Ciudadanos, que la futura línea circular de autobuses que se prevé poner en marcha para prestar servicio al barrio de Cimavilla -que actualmente carece de transporte urbano- tendrá una frecuencia de 20 minutos en días laborables (tres autobuses cada hora) y de media hora los fines de semana (dos autobuses cada hora). De lunes a viernes estaría cubierto por dos vehículos y los sábados y domingos por uno solo.

La puesta en marcha de esta línea, una vieja demanda del barrio, está pendiente de la concesión de fondos europeos, dentro de la convocatoria puesta en marcha por el Ministerio de Transportes «para la implantación de zonas de bajas emisiones y la transformación digital y sostenible del transporte urbano». En concreto a través de estas ayudas se pretende costear la adquisición de dos autobuses eléctricos algo más cortos que los del resto de la flota -unos diez metros de longitud- que serían los primeros de EMTUSA con este tipo de motorización y estarían dedicados en exclusiva a atender esta ruta. El coste de cada uno de ellos se estima en 440.000 euros (880.000 euros en total) y Fernández explicó que de no lograr el dinero en la mencionada convocatoria sería necesario buscar otras vías de financiación. La previsión es que el consumo eléctrico de estos autobuses ascienda a unos 7.886 euros al año. Y en lo que respecta a la plantilla, sería necesario dedicar a esta línea seis conductores, lo que supone casi 280.000 euros en gastos de personal. El concejal señaló que a la hora de diseñar el recorrido se han tenido en cuenta criterios como su conexión con otras líneas y con los equipamientos de referencia del barrio. Así, pasará por ejemplo junto al centro de salud de Puerta de la Villa, los institutos Jovellanos, Doña Jimena y Fernández Vallín y los colegios de la zona centro. Fuentes municipales señalan que por el momento lo que hay sobre la mesa es «un borrador» que prevé que la futura línea rodee Cimavilla por sus calles exteriores en sentido hacia el este, baje al Muro por Escultor Sebastián Miranda, atraviese la plaza del Carmen hacia El Humedal y se dirija finalmente hasta la plaza de los institutos, para después regresar al barrio. Su área de influencia será de 44.000 personas y su recorrido alcanzará los 131.000 kilómetros al año.

Por otra parte el concejal de Medio Ambiente y Movilidad, Aurelio Martín, anunció que las plazas que hay reservadas en la calle Menéndez Pelayo para vehículos de uso compartido se recuperarán para la zona ORA. Argumentó que ahora las empresas que ofrecen estos vehículos en alquiler pueden adquirir para cada uno de sus coches eléctricos una tarjeta que por 100 euros al año permite estacionar en cualquier plaza de la ORA. Admitió además el desgaste de pintura que sufre el ciclocarril para bicicletas de la avenida de la Costa, que se prevé repintar en mayo a la vez que se refuerza la señalización vertical indicando su limitación a 30 kilómetros por hora.

Por otra parte el PP vio rechazada su petición para que las personas con movilidad reducida no tengan que pagar 45 euros al año por aparcar en zona ORA. «Hay una total falta de empatía», criticó su concejala Ángeles Fernández-Ahúja.