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El monumento en recuerdo de los Héroes del Simancas que, desde 1958, decora la fachada del colegio de la Inmaculada que da a la calle Cabrales volvió a ser esta mañana motivo de división política en el Ayuntamiento de Gijón. Por un lado, las tres fuerzas de izquierda, votando a favor de la retirada de la escultura o, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, de su resignificación. Por otro, PP, Foro, Vox y el concejal no adscrito, rechazando la proposición planteada por Izquierda Unida y Podemos Xixón (que el PSOE respaldó con los votos de sus nueve concejales). Se escudó el equipo de gobierno (Foro-PP) en que es una cuestión que excede de sus competencias y que ha de ser el Principado quien la lleve a cabo. Lo dijo la concejala de Cultura, Montserrat López Moro y lo remarcó en sus dos intervenciones la alcaldesa, Carmen Moriyón.
No les valieron a los concejales Olaya Suárez (Podemos) y Javier Suárez Llana (IU) las justificaciones aportadas por ambas. «Si al gobierno le parece que no hay nada que hacer, no tenga nada más que decir. Ustedes se retratan solos», les afeó la primera tras reprocharles que ni siquiera hubieran planteado, en una enmieda a su proposición, la posibilidad de instar a la Administración regional a que inicie el procedimiento para retirar un monumento que calificó como «un mamotreto ante el que se producen exaltaciones fascistas». Subrayó Suárez Llana que su iniciatia no iba «contra nadie» sino que se trataba de una cuestión «de justicia». «Va de asumir un compromiso democrático y de cumplir la ley», la autonómica y la estatal, añadió.
Previamente a las intervenciones de los grupos había tomado la palabra Rafael Velasco, presidente de la Federación Asturiana Memoria y República, en representación de las siete organizaciones memorialistas que secunan la iniciativa de IU y Podemos. Se refirió, en su detallada exposición, a los hechos del pasado 28 de junio, día en que un grupo de personas se concentró ante el citado monumento para cantar el Cara al sol y lanzar vivas a José Antonio Primo de Rivera haciendo el saludo romano. «Un lugar de posible concentración de neofascistas no puede continuar presente en nuestra ciudad, salvo que queramos pasar de ser un ejemplo de políticas de memoria democrática a un símbolo de añoranza de un régimen autoritaro», expuso Velasco.
Para la edil de Vox, Sara Álvarez Rouco, ante lo ocurrido ese día «no cabe otra cosa que decir si le gusta o no le gusta». Ir más allá, afirmó, es «censura pura y dura de la libertad para expresarse». Tildó la propuesta de las dos fuerzas de izquierda de una «ridiculez» que «carece de sentido» y zanjó el tema asegurando que «la concordia y la no venganza es la única salida racional a todo lo que pasó».
La edil de Foro Montserrat López comenzó expresando su «pleno respeto a la ley», su «condena absoluta» a lo ocurrido el pasado 28 de junio y su «total desacuerdo» con las manifestaciones de Álvarez Rouco pero insistió en que, en los cinco años que lleva vigente la ley de Memoria Democrática en Asturias, el Principado no ha iniciado «de oficio»el procedimiento para retirar el monumento a los Héroes del Simancas de la fachada del colegio de los Jesuitas de Gijón. Y remató avanzando el voto de sus compañeros en el equipo de gobierno: «Sintiéndolo en el alma, votaremos en contra».
En la sesión plenaria de esta mañana, que se resolvió en cuestión de dos horas, salió adelante el Plan de Normalización Llingüística municipal para el periodo 2024/2027. El único voto en contra fue el de la edil de Vox. El documento, el tercer plan que aprueba el Ayuntamiento de Gijón, establece un plan de acción en el que vienen recogidos y formulados unos objetivos y procedimientos generales, así como 91 acciones y medidas concretas para avanzar en la normalización social del asturiano.
Con matices, todos los grupos se felicitaron por la aprobación de este plan de normalización. Y el concejal socialista Ramón Tuero señaló que queda aún bastante trabajo por delante. Por ejemplo, recordó, «a alguna concejalía le cuesta más que a otra» adoptar el asturiano.
También por mayoría, con el voto en contra de Vox, fue aprobada la proposición del PSOE para facilitar el acceso a la vivienda de las personas en situación de vulnerabilidad.
Lo que no salió adelante fue la iniciativa de Podemos para crear un museo de la Marina Civil en los terrenos de la antigua Naval Gijón que se recuperarán dentro del proyecto Naval Azul.
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