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Una imagen «dantesca» es la que dejó el jueves el atropello mortal de María Alegría Suárez González, de 88 años, por un camión de Cogersa. Los hechos tuvieron lugar en la calle Río de Oro de El Llano, casi a la altura del Centro Comercial de Los Fresnos, sobre las nueve y media de la noche, cuando el conductor del vehículo trabajaba en las labores de recogida de residuos.
El informe policial del caso, que está siendo investigado, ha sido trasladado al juzgado de guardia. Según ha podido saber este periódico, existen cámaras de seguridad de los negocios de la zona que muestran a María Alegría Suárez González cruzando por el paso de peatones cuando sucedió el fatídico accidente. La familia de la atropellada emprenderá acciones legales contra Cogersa por lo sucedido.
Los hechos tuvieron lugar ante un familiar de la fallecida, que se encontraba en la ciudad de vacaciones. María Alegría residía en un primer piso ubicado en la misma calle en la que se produjo el fatídico atropello. Uno de sus vecinos de su mismo edificio explicó a EL COMERCIO que era «una persona muy lúcida con una vida muy activa, e incluso tenía sus propias redes sociales», señaló. Así lo confirmó su entorno familiar, que indicó que era «una mujer muy alegre» que acudía asimismo «a clases de flamenco». Conmocionados por lo sucedido, anotaron que el próximo lunes iban a celebrar una comida familiar.
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María Alegría Suárez residía junto a su marido, del que «se ocupaba por completo» al ser gran dependiente. Por eso, la familia pedirá ahora ayuda a los Servicios Sociales para que se hagan cargo de él.
Testigos presenciales de lo ocurrido contaron a este periódico que la mujer se disponía a cruzar por un paso de cebra de la vía cuando el camión de la basura «arrolló a la señora». Estos mismos testigos afirman que «hubo que avisar al conductor porque no se percató de lo sucedido en el momento». La mujer quedó debajo del camión dejando una fatídica escena.
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Hasta el lugar de los hechos se desplazaron efectivos de la Policía Local para acordonar la zona y, más tarde, el cuerpo de Bomberos baldeó la zona donde todavía pueden verse las marcas del accidente mortal. El hecho despertó un gran revuelo en la zona, especialmente en los establecimientos hosteleros. Algunos de los negocios, que en ese momento contaban con una gran afluencia de clientes, decidieron cerrar tras el siniestro, pues «fue una imagen muy desagradable».
Fuentes de Cogersa confirmaban a este periódico que uno de sus vehículos se habían visto implicados en lo sucedido y enviaron sus condolencias a la familia de la víctima. Asimismo, la consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Nieves Roqueñí, expresó su pésame durante su visita a la Feria, con motivo del Día del Medio Ambiente. «Ha sido un desgraciado accidente», lamentó.
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