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El olor a quemado todavía inundaba hoy por la mañana la escalera del piso 34 en carretera Vizcaína en Gijón. En la noche de este viernes un vecino de 83 años falleció a causa de la inhalación de humo producido por un incendio declarado en su vivienda, cuyo origen fue por una pota al fuego.
«No era la primera vez que ocurría algo así», declaró una vecina a la puerta del portal, «ya había tenido algún susto». El hombre «vivía solo y no podía valerse por sí mismo», añadió. Tanto era así que se apoyaba mucho en sus vecinos del portal de al lado, aunque ellos no fueron conscientes de lo que estaba sucediendo hasta que fueron avisados por otros propietarios.
Uno de ellos fue Pablo García, quien, al ir a tirar la basura por la noche notó un intenso olor a quemado. «Tenemos un grupo de Whatssapp por si sucede algo en la comunidad. Al poco, un vecino escribió comentando lo mismo». Rápidamente se pusieron a investigar de dónde procedía el olor hasta que dieron con la vivienda del octogenario.
Aunque llamaron repetidamente al timbre nadie les contestó. Fue en ese momento, en torno a las once y media de la noche, cuando decidieron contactar con emergencias. Hasta el edificio llegó en primer lugar la Policía Local. «Uno de los agentes consiguió acceder a la vivienda a través del patio de luces», relatan los vecinos.
A pesar de las condiciones asfixiantes, «no dudó en permanecer en el interior e iniciar las maniobras de reanimación» al hombre que se encontraba tirado en el hall de su vivienda. Cuando llegaron los servicios sanitarios no pudieron hacer más que constatar su muerte.
Acudieron también los bomberos que se ocuparon de terminar de ventilar la vivienda ante la alta concentración de humo.
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