«Estaba fuera de sí, venía a por nosotros y fue muy complicado inmovilizarle»

El ciudadano senegalés afronta una nueva condena de seis años de cárcel y 18 de expulsión del territorio nacional, acusado de lesiones a cuatro policías nacionales que acudieron a la llamada de varios ciudadanos por el altercado protagonizado en agosto de 2019 en la calle de Juan Alvargonzález.

«Nada más bajarnos del coche patrulla me dijo: 'Ven aquí hijo de puta que te voy a matar'», relató otro de los agentes que resultó herido, quien añadió: «Cuando ya lo teníamos cogido me dijo: 'Te conozco, entrenabas en el mismo gimnasio que yo y sé dónde vives, si quiero te mato'. Los policías, que ejercen la acusación particular, estuvieron representados por la abogada del sindicato Jupol, Silvia Garrido.

El procesado solicitó la libre absolución, alegando que se encontraba bajo los efectos del alcohol y que no había protagonizado altercado alguno. «Acababa de comprar un teléfono móvil y no lo sabía manejar, justo me llamaron de mi país y estaba hablando muy alto porque no sabía cómo funcionaba el teléfono, pero no insulté a nadie ni rompí nada», dijo. Solo quiso responder a las preguntas de su abogada y manifestó: «No llegué a pegar a los policías, no me dio ni tiempo porque cuando me di cuenta estaban encima de mí y no me podía ni mover».

El juicio quedó visto para sentencia después de que la Fiscalía y la acusación particular elevasen a definitivas sus conclusiones y reiterasen la solicitud de seis años de prisión.

El exmilitar senegalés cuenta con varias condenas por delitos de lesiones y atentado a agente de la autoridad, además de una orden de expulsión del país pendiente de un recurso que ha interpuesto ante la Audiencia Nacional. Además, está a la espera de un juicio por malos tratos a su pareja.