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Todas las miradas estaban puestas en el cielo gijonés. El espectáculo Drone Show Festival realizado por la empresa Flock Drone Art hizo su primer pase ayer por la noche con un espectáculo en el que la geometría y el color fueron los protagonistas. Este año los espectáculos baten récords, ya que cada exhibición cuenta con trescientos drones, cien más que en la pasada edición.
Una vez que cayó la noche, y algo sobrepasadas las 22.45 horas previstas como hora de inicio, comenzó el juego de luces. Ante la atenta mirada del público que se acercó hasta las cercanías de Poniente para disfrutar el espectáculo, empezaron a aparecer unas figuras que emulaban distintos cuadrados de color verde, rojo, azul y rosa. Se trataba del primer pase de la jornada bajo título 'Geometrics 300', con la geometría como hilo argumental. Las figuras iban apareciendo y desapareciendo en base al ritmo de la música electrónica que, precisamente, fue creada para dicho espectáculo.
A través de los ritmos, las distintas luces de colores se iban transformando en otras figuras, pero siempre sin perder la esencia geométrica que caracterizaba al espectáculo. La primera actuación, de casi un cuarto de hora, quiso emular a las bandadas de estorninos y ese baile de la naturaleza pero llevado a sus puntos de colores. Durante la exhibición se pudieron ver como las luces de cada dron formaban poco a poco círculos, esferas o cubos que se alumbraban de forma intermitente o que se iban creando según iban apareciendo distintos puntitos en el cielo.
A mitad del espectáculo, la música tomó un ritmo diferente, aumentando hacia su nivel más álgido haciendo que los drones se acompasaran a la melodía y cambiaran rápidamente de una forma a otra haciendo que pestañear estuviera prohibido si el espectador no quería perderse nada de la actuación.
El primer pase cerró con el nombre de la compañía 'Drone Show Festival' dibujado en el cielo y, antes de finalizar, la empresa quiso hacer un guiño a la ciudad. Para ello, en el cielo se recreó la palabra 'Gijón' en color rojo, en formato 'letronas'. Unas brillantes luces blancas recorrieron toda la palabra de principio a fin.
Un contundente aplauso se escuchó en Poniente una vez que acabó la primera actuación. Esta primera jornada contaba con un segundo espectáculo en colaboración con la compañía vietnamita Hidrone en la que se tenía previsto elaborar una actuación con el mar del este y la cultura vietnamita como protagonistas, titulado 'Dance of the sea. Discover Vietnam'. Sin embargo, cuando la gente ya comenzaba a impacientarse -pasaban quince minutos de la medianoche y el espectáculo debería haber empezado a las 23.45 horas- se anunció por megafonía que el segundo pase quedaba cancelado «por un fallo técnico irresoluble». En muchas de las zonas de Poniente, donde no se oyó el mensaje, el repentino movimiento de gente que se levantaba y comenzaba a marcharse levantó las señales de alarma. Así pues, todo el espectáculo previsto se quedó en la mitad. Habrá que buscar una mejor ocasión para descubrir las bellezas naturales de Vietnam a través de imágenes en el cielo de Gijón.
Hoy, si todo funciona correctamente, se podrá disfrutar de otros dos espectáculos: 'Odyssey' de Flock Drone Art y centrado en un viaje por el espacio, y 'Above the sea', de Nacho Cruje, una coreografía inspirada en la mar.
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Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
José A. González y Álex Sánchez
Clara Alba y José A. González
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