La doble cara comercial de Corrida: rentas de hasta 14.000 euros y más locales vacíos

Muy pronto quedará libre también el bajo de la franquicia Liu-Jo (cierra hoy). Y abrirán Popeyes en el antiguo bajo del BBVA, un negocio de hostelería en el local que dejó Gocco y la Tienda de Korynto al lado de la cafetería.

El tramo más cotizado de Corrida (entre la plazas del Carmen y Seis de Agosto) tiene ahora mismo otros dos locales vacíos. El de Donatella (126 metros cuadrados), que está vendido a un inversor, y el que dejó libre por traslado Decathlon City (200 metros en planta y 150 en sótano), que se alquila por 14.000 euros. La misma renta que pagará la línea femenina de Scalpers en la esquina con la calle Langreo.

Otro eje de tiendas inmerso en cambios es el de Moros. Acaba de cerrar su emblemático café por vencimiento del contrato de arrendamiento y la propiedad lo alquila por 2.900 euros al mes. En los próximos meses cerrarán por jubilación allí dos negocios emblemáticos: la juguetería Manso y la mueblería Joseph. Como contrapunto reabre Festa y se traslada Cuplé desde Cabrales.

El entorno comercial del Parchís se ha visto sacudido por el anuncio del cierre de Calzados Chiqui tras seis décadas de presencia en la ciudad. La desaparición del emblemático negocio dará paso a la construcción de un nuevo edificio en ese solar. En esa misma zona, en el local que durante 47 años ocupó Masev, se instalará otra joyería con una renta de 2.000 euros mensuales.

El alicaído eje de Menéndez Valdés vuelve a retroceder y perder efectivos. Stress liquida por jubilación y ha cerrado la tienda de Tablas. Se trata de un local de 217 metros cuadrados con 140 de superficie comercial que se alquila por 2.200 euros al mes.

En esa misma zona la gran novedad es la reapertura del bajo de 1.000 metros cuadrados de la calle Cabrales en el que cerró hace un año la tienda de caballero de Cortefiel. El local ha sido alquilado por La Alpargata, una firma de calzado de León, que abrirá su tienda en abril.

En la calle Instituto ha bajado la persiana otro comercio histórico por falta de relevo generacional. Se trata de la boutique de moda Tamar, que estuvo previamente ubicado en la calle Corrida y vistió a la alta sociedad gijonesa.

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