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«Estamos desesperados, nos han entrado a robar dos veces en dos semanas, ya no sabemos ni qué hacer...». Una tienda de telefonía de la calle Asturias volvió ayer a ser objetivo de los ladrones que se llevaron, según su propietario, «todos los móviles que ... había en el negocio». «Es una impotencia, ya no sabemos cómo hacer para que no entren a robar, tenemos persiana, cámaras de seguridad... Pero da igual, entran y se llevan todo lo que encuentran a su paso», decía el comerciante mientras recogía con una escoba los restos de la luna del establecimiento.
Ocurrió pasadas las seis de la mañana, a una hora en la que la ciudad se despertaba y ya había tránsito de peatones y conductores. El asaltante violentó la persiana metálica de seguridad del establecimiento y, al igual que hace escasos días, fracturó la luna del escaparate para conseguir acceder. En cuestión de segundos se apoderó de todos los aparatos de valor que encontró en el local, los introdujo en una bolsa y huyó a la carrera.
Actuó solo y con la cara tapada, como quedó recogido en las imágenes de la cámaras de seguridad del negocio, con las que ya trabaja la Policía Nacional para lograr identificar y detener al ladrón. La investigación apunta a que e trata del mismo individuo que asaltó la tienda hace dos semanas, tal y como adelantó EL COMERCIO. El modus operandi y la franja horaria del robo coincide también con el que sufrió una hamburguesería de la calle San Melchor de Quirós y también en una tienda de telefonía ubicada en la calle Tomás Zarracina, en la esquina con Los Moros.
La semana pasada, el lunes, la Policía Nacional detuvo a un individuo de 38 años al que se la atribuyeron dos robos consumados en comercios y otros dos intentos, uno en una tienda y otro en una vivienda de la que huyó tras ser descubierto por los moradores. Quedó en libertad con cargos tras prestar declaración en el juzgado de guardia. Las fuerzas de seguridad tratan de determinar si este último asalto está relacionado con esa misma persona o bien se trata de otro delincuente que emplea métodos similares para cometer los delitos.
El que sí se le atribuye a ese arrestado es el asalto frustrado en una joyería de la Acerona. En esa ocasión, el propietario y los clientes de un karaoke próximo empezaron a increparle y el individuo emprendió una fuga en dirección a la estación de autobuses. También han sido objeto de los ladrones un establecimiento de compra venta de Constitución y un local comercial de Magnus Blikstad.
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