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O. SUÁREZ / G. MAESE
GIJÓN.
Sábado, 12 de septiembre 2020, 01:15
Se colaron en el edificio de madrugada, subieron a la azotea y una vez allí, en la planta 22, utilizaron material de escalada para descolgarse por la fachada y hacer un grafiti de unos 15 metros de longitud en horizontal. Ocurrió en el edificio Bankunión, en la calle Álvarez Garaya, uno de los de más altos de Gijón.
La pintada lleva el nombre de 'Zack', la misma palabra que desde hace años inunda mobiliario urbano y paredes de prácticamente toda la ciudad, provocando daños económicos incalculables. Esta vez el 'artista' ha ido a más y ha llegado a poner en riesgo su propia vida al plasmar su huella a unos 65 metros de altura. Su actitud, además de ególatra e irresponsable, es constitutiva de delito.
La Policía Nacional investiga ya los hechos después de que la comunidad de vecinos denunciase lo ocurrido la madrugada del martes al miércoles. Fue anteayer por la mañana cuando los residentes del inmueble quedaron estupefactos al contemplar la pintada en la parte más alta del edificio, en la fachada hacia el Puerto Deportivo, justo encima del mosaico de Alejandro Mieres.
Se da la circunstancia de que desde hacía días el edificio está siendo sometido a obras de impermeabilidad en la cubierta. Los autores de las pintadas (los investigadores creen que fueron varios) utilizaron parte del material para cometer la fechoría.
Hace meses, la Policía detuvo a una pareja joven que se había colado en el edificio, en pleno confinamiento, y estaba consumiendo estupefacientes en el lugar. Fueron sancionados por saltarse el encierro obligado por el estado de alarma y por acceder a una zona privada, así como por el consumo de droga.
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