El colegio Rey Pelayo, en Gijón, se engalana para recordar su periplo: «¡Estamos más vivos que nunca!»

El colegio Rey Pelayo, en Gijón, luce desde este lunes a mediodía una lona que cuelga de su fachada para recordar que están de vuelta después de dos años de periplo. «¡Más vivos que nunca!», reza una de los carteles que empezó a instalar una máquina elevadora a primera hora de la mañana y lo confirma la propia directora del centro, Pilar Álvarez. «Después de una pandemia y más de 730 días realojados, mucha gente nos decía que nunca íbamos a volver, ¡pero aquí estamos!», celebra.

Y no sólo es que hayan vuelto, sino que «cada vez somos más». Ya son 15 alumnos más de los que eran cuando empezó el curso y «hay mucha gente llamando o que ha venido a por los papeles para matricular a sus hijos», asegura Álvarez.

Coincide además que entre este miércoles y viernes serán las jornadas de puertas abiertas del colegio, para las que «ya tenemos mucha gente apuntada», indica.

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