El colegio Atalía le rendirá un homenaje a Thiago, «un niño alegre y muy cariñoso»

El niño vivía a pocos metros, en la calle Independencia, con su madre y su hermano de 15 años. Su abuela, su tío y otros familiares le acompañaban en la fiesta de celebración de Nochevieja que en cuestión de segundos se tornó en desdicha.

Thiago nació en Quito, Ecuador, de donde su madre es originaria. Vivió allí hasta que cumplió el año, cuando la mujer reunió los ahorros necesarios para poder traerlo a Gijón. El niño, «jovial, risueño y cariñoso», se integró a la perfección en el barrio. Mientras su madre trabajaba en tareas domésticas y de limpieza, el pequeño acudía a una guardería en La Calzada. Hacía meses, cuando le tocó empezar la etapa escolar, Viviana lo matriculó en el colegio la Atalía, cercano a su domicilio. Thiago pronto se granjeó el cariño de sus profesores, sus compañeros y de toda una comunidad educativa que ahora llora la terrible pérdida. En los próximos días el centro organizará un homenaje en memoria de su alumno.

Fue precisamente del centro escolar de donde partió la iniciativa de solicitar una ayuda de emergencia al Ayuntamiento para sufragar el coste de los gastos de tanatorio y la incineración. La madre agradeció el gesto y el de la asociación de ecuatorianos en Gijón, que mostró su intención de realizar una colecta para ayudar a la familia. Sin embargo, Viviana rechazó el dinero y manifestó que solo aceptaría la ayuda para los gastos del sepelio. «No quiere sacar ningún beneficio», explicaron fuentes familiares.