«El centro de innovación debe ser algo vivo para adaptar la FP a la demanda de las empresas»

Ingeniero Técnico Industrial, exdirector del Centro Integrado de Formación Profesional de la Laboral y ahora director general de Enseñanzas Profesionales de Asturias, Javier Cueli (Breceña, Villaviciosa, 1965) habla del «ambicioso» proyecto de la Consejería de Educación para poner en marcha, en el horizonte de mediados de 2023, un Centro de Innovación en Formación Profesional en una de las naves de los antiguos talleres de la Laboral y de la «necesaria» colaboración entre los centros de FP y el mundo empresarial para mejorar la empleabilidad del alumnado.

-Tienen el espacio, tienen el diseño interior, hábleme del contenido, del fin que se persigue con el Centro de Innovación.

-El fin es contar con un medio, con recursos humanos y tecnológicos, que permita mejorar la capacitación del profesorado tanto en aspectos metodológicos como tecnológicos y que permita también una relación más próxima de la que tenemos en este momento con el entorno empresarial.

-¿Profesores convertidos en alumnos?

-El objetivo es formar al profesorado y que este innove. Hay una parte metodológica, que hace ya más de veinte años que se conoce, sobre cómo enseñar en Formación Profesional. Lo que se busca es que eso no quede al criterio de los profesores o los centros sino que se fomente desde la Administración.

-¿De qué metodología se trata?

-Es lo que se suele llamar aprendizaje basado en proyectos. Un modelo en el que el alumno es el centro de la enseñanza. Aprovechar los recursos disponibles ahora mismo para aprender de otra manera. En FP ya se hacía, pero no de forma estructurada.

-¿La actualización de los docentes es un punto débil de la FP?

-El profesorado de Formación Profesional no está en la edad de piedra, pero su formación es más compleja. Ahora hay conocimientos que hace veinte años no existían. El profesorado tiene que tener una actualización metodológica, como el del resto de etapas del sistema educativo, pero también una actualización tecnológica acompasada a los tiempos.

-¿Qué respuesta esperan por parte del profesorado?

-No tenemos ninguna duda de que esa formación será bienvenida. De hecho, es una vieja demanda del profesorado.

-¿Cómo se articulará esa formación? ¿Quién la impartirá?

-La formación tecnológica, las empresas. Su colaboración no será solo para la formación. Una parte importante del desarrollo de la FP es la colaboración entre los centros y las empresas. Esa relación es imprescindible para mejorar la empleabilidad del alumnado.

-¿La nueva ley de FP mejorará esa colaboración y por tanto la implicación de las empresas en la formación del alumnado?

-La colaboración tiene que mejorar, con ley y sin ella.

-Por lo que me decía antes, la intención es aprovechar también el Centro de Innovación para avanzar en esa colaboración. ¿Cuál es la idea?

-El centro de innovación debe ser algo vivo que cada cierto tiempo vaya cambiando los proyectos que se hacen allí, de forma que tengamos una FP lo más adaptada posible a las demandas de las empresas. Colaborar para que haya más permeabilidad entre lo que se demanda y las líneas de formación del profesorado y posteriormente del alumnado.

-¿Cuáles serán las líneas de trabajo con las que se empezará a trabajar en el Centro de Innovación?

-La parte metodológica está muy clara. En la parte tecnológica la base serán las estrategias por donde se supone que puedan crecer las demandas de las empresas y el empleo en la región, que están relacionadas con las TIC, la ciberseguridad, la digitalización, la automatización... Por toda esa línea tiene que caminar.

-Recientemente visitaron el Centro de Investigación Aplicada de FP del País Vasco. ¿Qué ideas se trajeron de Rentería?

-Allí solo ves cosas buenas. Ellos son un ejemplo, un centro de excelencia en FP a nivel europeo. Bebemos de él pero no lo podemos tener como referencia, sobre todo por los recursos que tienen y el tiempo que llevan trabajando. Tenemos los pies en el suelo y sabemos que como mínimo llevamos quince años de diferencia con su centro de innovación.

-¿El de Asturias es un proyecto ambicioso?

-Sí. Es que no puede ser de otra manera.

-¿La Universidad Laboral será el gran campus de la Formación Profesional?

-No me gusta hablar de campus de la FP en términos de localismos. Me gusta ver Asturias en su conjunto. ¿Por qué decidimos ubicar el Centro de Innovación en Gijón? Porque la relación coste-eficiencia era muy buena, la instalación está prácticamente hecha. Y tiene una ubicación inmejorable: en la Milla del Conocimiento, con un centro integrado de FP al lado, la EPI, muchas empresas de base tecnológica...

-El proyecto del Centro Innovación partió del anterior equipo de la consejería, del que ha acabado siendo el único superviviente.

-Es cierto que soy el único que sigue, pero no me considero un superviviente.

-¿Qué tal con el nuevo equipo? ¿Se respira otro ambiente?

-Yo intento llevarme bien con todo el mundo. Estaba bien con el anterior equipo y estoy bien con el actual. Agradezco a la consejera, con la que tengo una relación excelente, que haya contado conmigo.

-¿Cómo ha ido la matrícula en FP este curso?

-La matrícula creció. Nuestra oferta es muy buena, tanto en cantidad (unas 9.600 plazas presenciales de primer curso) como en variedad. En total este año tenemos 15.845 alumnos.

-El Consejo de FP de Asturias trabajaba en un análisis de la oferta formativa. ¿Conclusiones?

-Seguimos trabajando. A la vuelta de vacaciones elaboraremos el documento. Hay un pequeño margen para incrementar algunos ciclos formativos porque los que aquí tendrían mayores expectativas laborales aquí los tenemos implementados en un porcentaje muy alto.

-¿Qué papel está llamada a jugar la FP?

-La FP es fundamental si queremos que las empresas arraiguen. Necesitamos una FP potente para que las personas tengan una buena empleabilidad. La FP es imprescindible para el desarrollo de la sociedad en general.