La Bonoloto deja casi dos millones en Gijón: «Menudo pelotazo. Ye la comidilla del barrio»

«Me he enterado por vosotros, cuando me habéis llamado de EL COMERCIO. Me habéis despertado con una alegría increíble», comentó ayer Iván Rodríguez. Él es el dueño del punto de venta mixto que validó el boleto acertante de la Bonoloto del sábado, con un premio de 1.721.822 euros. A su local se le conoce como el estanco de La Camocha y antes fue regentado por la madre de Iván durante 53 años. Su hijo, de profesión policía, pidió una excedencia y se hizo cargo de él en 2010.

«En el año 1998 llegamos a dar 109 millones de pesetas y también hace unos años dimos dos premios de 30.000 euros, pero nunca uno tan grande. Es una satisfacción increíble», relataba Iván Rodríguez, muy contento, al lado de su hija Katia.

Este afortunado lotero vive en Roces, pero hasta hace unos años tenía su domicilio en La Camocha, donde aún reside su madre, justo encima del estanco que ha traído la suerte, por lo que «deseo que le haya tocado a alguien de La Camocha, pero la verdad es que no lo sé. He mirado la combinación ganadora y no me suena de ningún cliente habitual, pero podría ser», aventuró. Tampoco espera un pellizco de gratificación. «Si cae algo, bienvenido será...».

«Papi has repartido mucho dinero, tienes que estar muy contento», apostilló su hija Katia, de 11 años, muy feliz y sonriente. Lo cierto es que para Iván Rodríguez, lotero de 48 años que lleva 15 al frente del estanco de La Camocha, ha resultado un impulso en «un momento en el que estaba un poco de bajón porque estoy cambiando la ubicación del estanco que se encuentra en la carretera de Lavandera 707, a otro local situado a 30 metros, y la burocracia complica mucho las cosas. Esto va suponer que todo va ir bien, estoy seguro».

En La Camocha, los comentarios no cesaban. «Yo, cuando abrí la persiana a las diez de la mañana, y leí en EL COMERCIO que el premio de la Bonoloto de 1,7 millones se había vendido en La Camocha, aluciné. ¡Menudo pelotazo! Ye la comidilla del barrio. Eso sí, a mí no me ha tocado, que aquí estoy trabajando un domingo más». Saray Díaz, de la Sidrería Casa Nacho, se preguntaba ayer, como todo el barrio de la parroquia de Vega, a quién le sonreiría la suerte en el sorteo del sábado. «Oye, ni tan mal, tomando un buen café y con salud, eso sí, igual de pobres. Que haya alegría y que lo disfrute el afortunado, pero desde luego que yo tampoco soy el ganador. ¿Quién será? Ojalá sea alguien de aquí, de La Camocha», destacó Carlos Pérez, cliente del establecimiento y vecino del barrio.

«Estará por lo menos en Cancún, por aquí ya no va a estar», proclamó David Suárez en la Confitería Asun. «A mí, desde luego, no me ha tocado y no creo que esté aquí tan tranquilo tomando el café», le replicó la confitera mientras servía un zumo, un café, un pinchín y la gente del barrio se miraba buscando ese brillo de fortuna en sus ojos. Tampoco cesaban los comentarios delante del Kiosko de Julio, en la plaza de Vega. Allí había instalado un ameno corrillo de vecinos que se escudriñaban unos a otros. «La verdad es que no sabemos quién ha sido el afortunado, mira que yo juego a todo, pues nada, no ha habido suerte», comentaba el kioskero Julio César Fernández. «Le tocaría a Juan», decía otro vecino. «A mí esta vez no. Me tocó el segundo premio de la Lotería de Navidad en 2023, pero se me ha escapado esta vez. No siempre me va a tocar a mí», decía riendo Juan Uría.

Los 1,7 millones de La Camocha dan para bastante. Pero están lejos de los premios 'top' registrados en Gijón. El más alto fueron los 19,2 millones del Gordo de la Primitiva en el puesto lotero de la calle Río de Oro (abril 2021), seguidos de los 17 de Euromillones del de la calle Corrida (octubre 2023) y de los 15 de Euromillones del situado en Los Fresnos (febrero 2016).

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