Las bicis dan el relevo al coche

Este área comercial y de servicios, que durante la semana es un hervidero de coches y transeúntes, aparecía ayer inusualmente vacía. La circunstancia la aprovecharon peatones y ciclistas, y en especial algunos niños que recorrieron con sus patinetes el asfalto habitualmente vedado para ellos. Esta peatonalización temporal fue bien recibida entre vecinos y hosteleros. Aunque, muchos opinaron que al aplicarse en domingo su impacto no alcanzó las dimensiones que supondría un cierre en día laborable.

Los que si pudieron constatar los efectos de la ausencia de tráfico fueron los hosteleros. «Nos da la oportunidad de comprobar cómo estaría la zona sin coches y a mí me encantaría que se peatonalizase la calle. Sin duda, esto beneficiaría las terrazas y a todo el comercio de la zona», afirma el hostelero Javier García, en una calle Donato Argüelles «irreconocible» sin el constante paso de vehículos. Susana Margolles, hostelera de la calle Asturias, piensa que la mejora medioambiental de una vía peatonal es «innegable», pero, por otro lado, se pregunta «qué opciones de aparcamiento se van a ofrecer a los clientes de una zona donde ya resulta muy difícil estacionar».

Otros ciudadanos están convencidos de que disponer de un centro urbano sin coches contribuiría a mejorar la calidad de vida de los vecinos y a estimular el comercio local. «Lo hemos visto en otras ciudades. Aunque los comerciantes tiene miedo al principio luego se dan cuenta que las calles peatonales hacen que la gente compre más, vamos más tranquilos y nos fijamos más en las cosas», aseguró Carmen de La Torre.

Las bicicletas fueron protagonistas del Día Sin Coches en Gijón. Cerca de un centenar de ciclistas de todas las edades participaron en la Bicicletada, organizada por los colectivos Asturies ConBici y 30 Días en Bici. La marcha multicolor salió a las doce del mediodía de la plaza Mayor rumbo al Acuario, dibujando una estela de bicicletas de todo tipo que se abría paso al son de los timbres. Numerosas familias con niños pequeños recorrieron la ruta en favor del transporte alternativo. «Es una actividad genial para los niño. Nosotros la practicamos desde siempre, sobre todo en una ciudad como Gijón en la que cada vez nos lo ponen más fácil», comenta Estrella Vallaure que disfrutaba del paseo en bicicleta junto a su marido y sus tres hijos, de 9, 7 y 4 años.

Tras recorrer el carril bici de El Muelle y El Fomento la Bicicletada llegó a su destino. Precisamente frente al Acuario se instaló uno de los dos aparca bicis vigilados y gratuitos de la jornada y que permitían a los ciclistas dejar sus vehículos a buen recaudo mientras disfrutaban de la jornada dominical. El otro estacionamiento se ubicó en la calle Langreo, junto a un taller ITBicis, donde voluntarios de La Biciclante ayudaron a solucionar pequeñas averías, revisar el estado de las bicicletas e informan acerca de las normas y consejos para circular. «Les ofrecemos revisar sus bicis y arreglar algún problema. Los más comunes son los relacionados con las zapatas de los frenos y el cambio de marcha», explicaba, Vicente Martínez, miembro de La Biciclante. Esta organización se dedica a fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte alternativo al coche y a fomentar el uso de las normas para circular a dos ruedas. «Es importante recordar que la bicicleta es un vehículo y como tal debe cumplir las normas de tráfico», destacó.

El Día sin Coches también se celebró en el Jardín Botánico Atlántico con un programa de actividades gratuitas para quienes llegaron a sus instalaciones en autobús para celebrar el equinoccio de otoño.

Todas las actividades llevadas a acabo en Gijón durante la Semana Europea de la Movilidad tienen como objetivo «concienciar y sensibilizar» a los ciudadanos de la importancia de desarrollar una movilidad sostenible en la ciudad, aseguró ayer el concejal de Medio Ambiente, Aurelio Martín. Además, algunas iniciativas, como las relacionadas con la gestión del tráfico y la peatonalización, anuncian medidas «de futuro que nos hará dejar una sociedad más sostenible y más parecida a lo que está pasando en otras ciudades europeas», indicó el edil.

En cuanto a la ampliación de las zonas peatonales, Martín explicó que las zonas a intervenir se encuentran «en estudio» y se llevarán a cabo «a partir de la puesta en marcha del Plan de Movilidad y de la propia Ordenanza de Movilidad». Será la recién constituida Oficina de Movilidad la que desarrolle ese trabajo, una labor con la que se espera poder concretar «en pocos meses» qué calles pueden quedar libres de tráfico.

Lo que si confirma el concejal de Medio Ambiente es que «va a haber más peatonalización y, sobre todo, muchas más zonas 30». Martín insistió en que el objetivo es «hacer una ciudad amable para el conjunto de los ciudadanos y eso pasa por dar mucho más protagonismo a los peatones y mucho menos a los vehículos».