Numerosos gijoneses repararon ayer en la presencia de un barco singular que parecía una 'fábrica flotante' y que recortaba su figura sobre la bahía de San Lorenzo con cuatro altísimas columnas metálicas grises que semejaban chimeneas. Se trataba del 'Sea Challenger', una embarcación colosal que se utiliza para labores de instalación de parques eólicos marinos offshore. Atracó al anochecer en el muelle Olano del puerto de El Musel y se marchó a primera hora de la mañana para seguir con sus trabajos pesados en alta mar.
Publicidad
El 'Sea Challenger' navega bajo pabellón de Dinamarca y tiene un tonelaje bruto de 15.934 toneladas. Orgullo de la flota del grupo de ingeniería oceánica belga DEME, fue construido en 2014 por Cosco Beijing. Tiene una eslora (longitud) de más de 133 metros y una manga (anchura) de otros 39. El impresionante barco, de la tipología 'jack-up', es un prodigio de la ingeniería marina.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
A la venta los vuelos de Santander a Ibiza, que aumentan este verano
El Diario Montañés
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.