Una empleada de Edimar, ante el agujero realizado por los butroneros para perpetrar el robo. J. PAÑEDA

Una banda de butroneros roba en dos naves de Porceyo en la misma noche

Vigilaron las empresas, de electrónica, y realizaron dos precisos agujeros en la pared con acceso directo a las oficinas. Se llevaron dinero y material

OLAYA SUÁREZ

GIJÓN.

Sábado, 14 de diciembre 2019, 01:30

Estudiaron y vigilaron durante días sus objetivos. Querían conocer la forma más directa de acceder, el lugar en el que se encontraban las cajas fuertes y las medidas de seguridad con las que contaban las empresas. La Policía Nacional investiga los dos robos cometidos por ... el procedimiento del butrón en sendas empresas de electrónica del polígono de Porceyo.

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Los asaltos tuvieron lugar durante la madrugada del jueves al viernes. De una de las naves, la de la empresa Edimar, los ladrones se llevaron el dinero de la caja fuerte -unos 1.500 euros-, así como gran cantidad de material electrónico, ordenadores portátiles y tablets. Accedieron a la instalación cortando la valla metálica perimetral y, una vez dentro, realizaron un agujero que comunicaba directamente con la estancia de las oficinas.

«Estaba todo destrozado»

Provocaron importantes destrozos, entre ellos los de las cámaras de seguridad para evitar que el circuito de grabación recogiese el golpe. El personal de seguridad se percató de lo ocurrido horas después. «Estaba todo destrozado cuando llegamos», acertaban a comentar los empleados, impresionados por lo ocurrido horas antes. Para entonces la banda ya había entrado en la otra nave, en Muniello, a escasa distancia de la primera, ambas en la calle Max Planck. Los responsables del negocio dieron cuenta de los desperfectos causados por los butroneros, si bien no echaron en falta ni dinero ni efectos de valor. Todo apunta a que los delincuentes huyeron precipitadamente antes de consumar el golpe, probablemente al sentirse sorprendidos. La investigaciones, realizadas por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV), apuntan a que podría ser obra de una banda especializada e itinerante.

Entre las pistas está la presencia de un vehículo sospechoso que personal de otra nave próxima habría visto pocas horas antes de los dos robos. Observaron cómo varios individuos se bajaban de un coche que esperaba con el motor en marcha y al acercarse para ver qué hacían, se marcharon del lugar.

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