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IVÁN VILLAR
GIJÓN.
Domingo, 27 de octubre 2019, 02:10
Un campo de fútbol, una pista de futbito, otra asfaltada para tenis, un enorme frontón y un edificio para almacén y vestuarios. Son las instalaciones deportivas construidas por la Autoridad Portuaria de Gijón en los años 70 sobre una parcela de 11.400 metros cuadrados ... ubicada entre la iglesia de Jove y la calle Francisco Eiriz y que actualmente están completamente abandonadas, a la espera de una venta que en su primer intento no halló comprador.
Hasta 2017 el campo de fútbol era utilizado por el club Puerto de Gijón, un equipo sin más relación con la entidad portuaria que su nombre y un permiso para entrenar y competir en esos terrenos. Pero la decisión de los responsables de El Musel de sacar ese suelo a subasta les dejó sin sitio donde jugar. Dos años después la Autoridad Portuaria sigue siendo la titular de los terrenos, pues no recibió ofertas por ellos y acabó declarando desierta la subasta.
Cuando se conoció la intención del El Musel de desalojar al club Puerto para la venta de los terrenos, comenzó una campaña contra esa medida que tenía no solo el respaldo de los vecinos, sino también de los partidos políticos. Varios de ellos plantearon modificar la ficha del PGO para garantizar un uso deportivo para estos terrenos. El PSOE, por su parte, defendió desde el primer momento que el Ayuntamiento se hiciera con ese suelo para mantener su carácter de espacio deportivo y que, además, fuera público. Los socialistas acabaron transformando su propuesta de compra municipal en una iniciativa plenaria que fue aprobada por mayoría absoluta gracias a sus votos y los de los concejales de Foro. Pero la adquisición de los terrenos no llegó a realizarse.
Dos años después, ya en el gobierno local, el PSOE recupera la idea de que este suelo pase a ser patrimonio municipal. «Estamos interesados en ese equipamiento», asegura el concejal de Deporte, José Ramón Tuero, aunque pide cautela. «Nos gustaría disponer de él, si se pone a tiro», matiza aclarando que en ningún caso pretenden interferir en el conflicto que se abrió entre la dirección de la Autoridad Portuaria y el comité de empresa de El Musel a raíz del inicio del mencionado y fallido proceso de subasta, que los sindicatos llevaron incluso a los tribunales.
La construcción de estas instalaciones se hizo con cargo al fondo para fines sociales. Dado que durante varios años parte de las aportaciones que tenía que hacer el Puerto a este fondo se dedicaron a la creación de este espacio deportivo, los trabajadores entienden que las instalaciones no pueden desmantelarse sin su consentimiento y sin compensarles por ello. De hecho el Ayuntamiento ya trató de cerrar hace años un acuerdo con el Puerto para que le cediera estos espacios, pero la negativa del comité de empresa impidió la operación. Y cuando hace dos años la Autoridad Portuaria optó por la subasta, los sindicatos pusieron sobre la mesa una reclamación de 450.000 euros.
En la operación de 2017 el suelo que ocupan estas instalaciones se puso a la venta de forma conjunta con otras dos parcelas vecinas. En total se subastaban 16.102metros cuadrados con un precio de salida de 756.088 euros. El Ayuntamiento aspira a que una hipotética compra se sitúe en todo caso muy por debajo de esa cantidad, dado que solo afectaría a la parcela de los terrenos deportivos.
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