MARCOS MORO
GIJÓN.
Miércoles, 25 de enero 2023, 02:04
El Ayuntamiento completó ayer el traslado a un recinto seguro de la aves afectadas por el inicio de los trabajos de dragado en el parque de Isabel la Católica. Ocas, patos, tarros y demás habitantes de la laguna pequeña de Las Driadas, la que está más próxima a El Molinón, fueron capturados por personal de Parques y Jardines y puestos a buen recaudo en un nuevo cercado que se ha habilitado en la pradera anexa a la primera zona húmeda donde se van a empezar a retirar los lodos acumulados durante más de cuatro décadas.
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Los animales así realojados contarán con unas piscinas de fibra, a modo de comederos, para que puedan tener allí suministro periódico de comida sumergida a salvo de las palomas.
La empresa avilesina Construcciones Estévez Mena continuó ayer con las labores de vaciado del estanque pequeño. La incorporación de una bomba trifásica permitió acelerar el desagüe en el canal del Molín. Y la bajada de nivel de agua hasta prácticamente el estrato donde empieza la acumulación de lodos que hay que dragar permitió ayer al Ayuntamiento ya la retirada de las especies piscícolas que quedaban en el lecho de la laguna. Finalmente se prescindió de la pesca eléctrica y se recurrió a trueles, que son herramientas que se utilizan para el marisqueo, para capturar anguilas, la única especie autóctona que interesaba conservar, y también peces koi, pese a ser especie exótica invasora. Los ejemplares así pescados se reintrodujeron en el estanque grande central, el lago oeste.
Una pareja de cisnes blancos se 'resistió' a dejar el estanque
El realojo de aves del estanque pequeño a su nuevo hábitat en la pradera anexa al mismo no fue un éxito completo porque una pareja de cisnes blancos se resistió con todas sus fuerzas y pericia animal a abandonar la laguna de la escultura de Las Driadas. Por más que el personal de Parques y Jardines quiso darles caza, las aves se la ingeniaron para escapar de cada estratagema para acorralarlos y sacarlos hacia la pradera donde se encuentra el resto de animales reagrupados. Hoy el cuidador de la fauna del parque de Isabel la Católica, José Luis García, se enfundará indumentaria de vadeador para intentar culminar la operación de los cisnes que quedó inconclusa ayer. Contará para ello con la ayuda de los operarios de la contrata encargada del dragado de los estanques.
Todo el entorno de la laguna pequeña quedó ayer vallado para impedir el paso a personas ajenas a la obra. También empezó la instalación de casetas para ser utilizadas como vestuarios por los operarios de la contrata avilesina, cuyos responsables estuvieron sobre el terreno, en el parque, supervisando todas las operaciones.
Aunque la persistente lluvia no animaba mucho ayer a adentrarse en el parque de Isabel la Católica, fueron varios los paseantes que transitaban por la avenida de El Molinón que se detuvieron a ver el desarrollo de los trabajos de vaciado del estanque este. Según el plan de trabajo, la próxima semana empezará el dragado en sí con métodos convencionales de excavación.
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