La avenida de El Molinón dará continuidad a un gran paseo entre el parque fluvial y El Arbeyal

«Es una idea muy potente que nos sitúa como una de las ciudades que más apuesta por criterios de sostenibilidad medioambiental», destacó Martín, quien también puso de relieve que es «el futuro que están marcando las autoridades europeas y en España el Ministerio para la Transición Ecológica».

El concejal de Medio Ambiente también aseguró que los partidos que integran el gobierno local, PSOE e IU, manejan encuestas que otorgan a la reforma peatonal de la avenida de El Molinón «un apoyo del 80% de la población de Gijón». Martín también celebró la presencia en la reapertura de la vía, tras casi dos años y medio de cierre, de los portavoces de Ciudadanos, José Carlos Fernández Sarasola, y Podemos-Equo, Laura Tuero: «Estamos cuatro grupos. Más de dos tercios de la Corporación. Hay pocas cosas en la política española que conciten dos tercios de apoyos y este parque, con críticas que podemos hasta compartir, tiene un apoyo de 19 de 27 concejales».

La alcaldesa Ana González felicitó a las concejalías de Obras Públicas y Medio Ambiente, así como a Parques y Jardines, por un resultado que calificó de «espectacular» y vaticinó que «pronto la zona va a ser muy visitada y transitada por toda la ciudad». Además celebró que con esta actuación, en la que se ha plantado nuevo arbolado y se han generado zonas estanciales, el parque de Isabel la Católica haya ganado 14.000 metros cuadrados de paseo y zonas verdes. Para la regidora esta obra «representa ese cambio de modelo de ciudad que queremos para conseguir un Gijón más verde, paseable y más pensado para las personas, donde los coches no lo ocupen todo».

El concejal de Obras Públicas, Olmo Ron enfatizó que con esta reforma peatonal, a la que aún quedan para su conclusión los 100 metros finales de entronque con la glorieta de El Molinón, «se gana más espacio para el ciudadano, para jugar y hacer deporte». Ron también destacó los espacios de riego sostenible que permitirán aprovechar las aguas pluviales para este fin evitando que acaben vertiéndose a los colectores 15.000 metros cúbicos al año (el equivalente a cuatro piscinas olímpicas llenas).

Stop Muro acudió a la inauguración para expresar su repulsa.