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Ya está todo listo. La edición XVIII del Festival Internacional Aéreo apunta, a juzgar por la expectación que ayer generaron las dos sesiones de entrenamientos, que cosechará un nuevo éxito rotundo. Otro más. Las 23 aeronaves civiles, militares e institucionales que participarán en el certamen del domingo sobrevolaron ayer la bahía de la playa de San Lorenzo.
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A las once horas y cincuenta y cinco minutos de la mañana hizo su aparición el caza Eurofighter sobre la playa. Fue cinco minutos antes de que los socorristas de Salvamento comenzaran a pedir a las decenas de bañistas allí presentes, la obligatoriedad de salir del agua. Ni reproches ni desobediencias. A las 12 horas ni un solo bañista en el agua. Y aunque pasaron los minutos y alguno se despistó, la prohibición al baño en una jornada soleada y playera, no trajo consigo problema alguno. Ni siquiera la Policía Local tuvo que apoyar al equipo de Salvamento en las labores de restricción. Con marea baja, propicio para mojar los pies en la orilla, y veinticinco grados en los termómetros.
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Como era de esperar, el Eurofighter volvió a ser la aeronave más aclamada, emoción que se supone se repetirá mañana. Y más aún lo será cuando la megafonía anuncie a sus mandos al piloto asturiano Félix Diéguez, natural de El Entrego. «Ya estamos en Asturias con la mayor de las ilusiones. Ahora, confiemos que el 'nuberu' nos deje volar», declaró Diéguez al término de la primera sesión de entrenamientos.
Su aparición sobre las aguas de Gijón está prevista a las 14.30 horas del domingo. Cabe recordar, por cierto, que ante la inestabilidad del parte meteorológico, los ensayos previstos para hoy fueron, finalmente, suspendidos por la organización. Ayer por la tarde, como es tradición, tuvieron lugar los actos de protesta de la asociación Folixa por la Paz, mientras un pasacalles dio inicio al programa de actividades que tendrán lugar en la Casa del Chino, en el barrio de Cimavilla.
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Con todo ya a punto, la XVIII edición del Festival Aéreo comenzará el domingo a las 12 horas. Una hora antes, a las 11, no se permitirá el baño en la bahía gijonesa. La previsión es que el espectáculo se prolongue, al menos, durante dos horas y media. «Estamos preparados», comentaban ayer los pilotos en las redes sociales oficiales de un festival que, previsiblemente, volverá a reunir a cerca de 300.000 personas en el Muro, la playa y el cerro de Santa Catalina.
Según las previsiones meteorológicas, se vivirá una jornada en la que lucirá el sol, por lo que la organización advierte de la necesidad de hidratarse durante el espectáculo. También de proteger a los niños de los estruendos.
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