Amenaza a unos camareros en Gijón con un cuchillo y un bate que escondía en la silla de ruedas de su padre

Amenazó a los empleados de una cafetería de la calle Corrida con un cuchillo de grandes dimensiones, que escondía junto a un bate de béisbol en la silla de ruedas de su padre. Se fue del lugar empujando a su anciano progenitor y fue interceptado por la Policía Nacional unas calles más allá, en San Melchor de Quirós, gracias a la descripción facilitada por los testigos. Era difícil que pasasen inadvertidos.

El hombre, de unos 50 años, se encontraba en estado de gran alteración y mientras le facilitaba los datos a los agentes, hacía planchas en el suelo, se sentaba y se descalzaba, sin atender a los incesantes llamamientos del padre para que intentase, mínimamente, entrar en razón. Acabó detenido por enfrentarse a los policías, que tuvieron que reducirle entre varios efectivos e introducirle por la fuerza en el vehículo mientras él intentaba agredirles y mostraba una fuerza inusitada que hacía muy complicado meterle en el patrulla.

Ocurrió poco después de las cinco de la tarde en pleno centro de la ciudad. Los empleados de la cafetería en la que se inició el violento episodio explicaron que entró empujando la silla de ruedas y que en momento dado «se le cruzaron los cables» y sacó un cuchillo. Cuando le dijeron que estaba a punto de llegar la Policía, huyó rápidamente del lugar, a paso ligero empujando la silla de ruedas del padre.

Se trata de un vecino de Cimavilla que al parecer tiene problemas psiquiátricos y no es la primera vez que protagoniza un incidente similar. De hecho, tiene una orden que la prohíbe portar armas, como son el cuchillo y al bate de béisbol, que llevaba en una bolsa de plástico atada con un nudo y guardaba en la silla de su anciano progenitor.

Fue trasladado primero a un centro sanitario en calidad de detenido para posteriormente llevarle a los calabozos por amenazar a los empleados del local de hostelería, enfrentarse a los agentes de la Policía Nacional e incumplir la medida judicial que le prohíbe portar armas.

El padre del arrestado, que no podía manejar él mismo la silla de ruedas, fue acompañado hasta su domicilio.

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