La capilla de San Esteban del Mar será un centro cultural

La capilla de San Esteban del Mar será un centro social y cultural del barrio de El Natahoyo, acabando con una situación de abandono que se prolonga desde hace años. La iniciativa partió de los Rotarios de Gijón, que vieron en este pequeño templo, que data del año 1651, la posibilidad de recuperar parte del patrimonio de la ciudad y, además, dar nueva vida a una zona de El Natahoyo que se encuentra en unas condiciones manifiestamente mejorables. Desde hace meses, los rotarios trabajan en desarrollar este proyecto con diferentes apoyos desinteresados y, también, con la colaboración del Ayuntamiento de Gijón y, por supuesto, de la Compañía de Jesús, pues el pequeño templo está en terrenos de su propiedad, dentro mismo de los muros de la Fundación Revillagigedo.

Esta capilla, se asegura que la más antigua de Gijón en la actualidad, fue desacralizada hace ya casi un siglo, aunque no se dispone de la fecha exacta, y su interior sufrió muchas actuaciones externas e internas, aunque no han desvirtuado sus formas y sus muros. La mamposteria sigue en pie a pesar de haber sido utilizado el pequeño templo para diferentes funciones, como dispensario, almacén e, incluso, gimnasio.

No volverá a tener culto

Ahora, se pretenden recuperar sus formas originales, respetando algunos viejos elementos y restaurando las partes más deterioradas, todo ello con el visto bueno necesario de Patrimonio, ya que la antigua capilla tiene el nivel máximo de catalogación.

No volverá a estar al culto y su futuro estará más bien ligado a la vida cultural de la ciudad, ya que podrán celebrarse en la misma, una vez concluida la obra, desde conferencias hasta exposiciones y todo tipo de actos culturales. Su capacidad aproximada será para unas setenta personas.

De forma paralela a la restauración, que pretende ser iniciada el próximo año, se llevará a cabo una reforma urbanística del entorno, eliminando una parte del actual cierre de la Fundación Revillagigedo y creando una entrada directa desde la calle de Mariano Pola al futuro nuevo centro cultural.

El club Rotario de Gijón está embarcado en este proyecto como su objetivo para el próximo año y, aunque quedan detalles por concretar, la bueva disposición del Ayuntamiento y de los jesuitas hace que se tengan fundadas esperanzas de sacar el proyecto adelante. De esta forma, El Natahoyo tendría un elemento dinamizador de su vida social y cultural y la capilla, que amenazaba ruina, sería salvada de un posible futuro derrumbe.