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N. PRIETO
Miércoles, 30 de marzo 2016, 02:33
Alicia del Río, presidenta de la comisión gestora que hace un año se hizo cargo de la dirección del Club Hípico Astur (Chas), sin perjuicio de las competencias de la Administración Concursal, busca apoyos para presentar candidatura en las elecciones convocadas para el próximo 8 de mayo.
Las últimas actuaciones de la citada comisión gestora, que firmó la petición al Juzgado Mercantil para la liquidación de la entidad, así como los argumentos defendidos por sus representantes en la última asamblea hacen previsibles los objetivos de la pretendida candidatura, sea quien sea quien al final la encabece.
La gestora del Chas planteó la liquidación formal de la entidad como mejor forma de conservar a disposición de los socios los actuales terrenos y las prestaciones sin derramas ni incrementos de cuota.
Alicia del Río defendió incluso en los juzgados, durante el juicio en el que se discutía la competencia de la gestora para proponer la liquidación para resolver el concurso de acreedores, que perder el nombre del Chas es la única forma de propiciar que puedan presentar ofertas de continuidad otros clubes, como el Grupo Covadonga o el Club Natación Santa Olaya, que han expresado ya interés de integración tras el pago de la cantidad adeudada para liquidar a los acreedores.
Convenio aprobado
La propuesta de convenio para poner fin al concurso de acreedores que presentó el hasta ahora último presidente del Chas, Miguel Salvador López, que prevé la enajenación de parte de los terrenos, tiene validez legal y ya fue aprobado por la magistrada que lleva el caso, aunque fue rechazada explícitamente por los socios en asamblea. Sin embargo, la propuesta de liquidación aprobada por la gestora sin someterla a decisión de la asamblea resultó judicialmente rechazada.
La liquidación del Chas, a la que se llegaría por incumplimiento del convenio que está en trámite, no garantiza que Grupo o Santa Olaya adquieran las instalaciones del Chas, pero habida cuenta de que son dos los clubes interesados, es difícil pensar que entre sus propuestas no estará la que el Juzgado Mercantil considere más favorable para la entidad, que es la que la autoridad judicial tendría por ley la obligación de elegir.
Hay que tener en cuenta, en ese sentido, que no se valora solo la oferta económica, que podría deparar una propuesta más cuantiosa que la necesaria para cubrir la deuda, no solo porque está probado un interés inversor, sino también porque el patrimonio del Chas es mayor que su deuda. La oferta económica importa poco a los socios del Chas porque no habría reparto.
La ventaja de Grupo y Santa Olaya, si llegan a poder concretar una oferta, se fundamenta en el mantenimiento de los empleos y en la integración de los socios, que seguirían disfrutando de lo mismo, aunque con una propiedad más compartida.
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