El informe destaca el incumplimiento de actuaciones medioambientales como la regeneración de arena en San Lorenzo

El informe de las interventoras estatales sobre las obras de ampliación de El Musel destaca también el incumplimiento de requisitos medioambientales del proyecto. En concreto se refieren a actuaciones que o bien no se han realizado o no constan en el expediente revisado por ellas. Aluden en primer lugar a la elaboración de un proyecto de regeneración de la playa de San Lorenzo, en el que se propondrá una forma en planta para la playa como consecuencia de la ampliación del puerto. Este proyecto debía contar con la conformidad de la Dirección General de Costas y deberá estar redactado antes del comienzo de la obra del dique de abrigo previsto para la ampliación del puerto, y se ejecutará antes de la finalización de dicho dique, o, en cualquier caso, cuando en las batimetrías de seguimiento se observen modificaciones significativas en la configuración de la planta. Las peritas Fátima Blasco e Ilmice Navarro señalan en el texto enviado a la Audiencia Nacional que «no consta entre la documentación aportada el proyecto de referencia debidamente conformado por la Dirección General de Costas».

Se detienen también las interventoras en el incumplimiento de lo establecido en la declaración de impacto ambiental del proyecto de ampliación para llevar a cabo la regeneración. En este caso definir un yacimiento de arenas, garantizando la viabilidad de la extracción y la idoneidad del material. «No consta entre la documentación aportada el proyecto de referencia ni la pronunciación al respecto de la Dirección de Costas», reiteran también en ese caso las expertas, que detallan como otra anomalía que se llega a presupuestar la regeneración de la playa gijonesa, con 200.000 metros cúbicos de arena, por un importe de 1.160.000 euros.

Emisario de Aboño

El informe de la Intervención del Estado también alude a la ausencia de un estudio específico sobre el emisario de Aboño. A pesar de que la declaración de impacto ambiental del proyecto determinaba que «con el fin de satisfacer el criterio guía de calidad de las aguas de baño, fundamentalmente en la playa de Xivares, la Autoridad Portuaria de Gijón llevará a cabo un estudio de dispersión que determine en qué medida se debe modificar el diseño del citado emisario, si fuese necesario, para lograr dicho objetivo. Las expertas también indican en su informe que en el tratamiento y protección de este emisario submarino está pendiente de estudio por la Confederación Hidrográfica.

IGAE revela, asimismo, que el proyecto se licitó antes de tener de tener asegurada su financiación con fondos de cohesión europeos.