Los chopos del acceso a Las Mestas «suponen un riesgo inasumible» para las personas

No hay lugar a la duda. El equipo técnico de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Gijón, con su jefe a la cabeza, Juan Carlos Martínez Sánchez, opinan, tras un pormenorizado análisis, que la totalidad de los chopos de la calle de Jesús Revuelta supone un «riesgo inasumible» y, en consecuencia, procede una urgente tala de los mismos. El informe oficial del estado del citado arbolado, al que ha tenido acceso EL COMERCIO, detalla las condiciones del mismo, con «grandes pudriciones internas», y también la cantidad de ocasiones en las que fue necesario intervenir por caída de ramas, con evidente peligro para los peatones en una zona muy transitada que sirve de acceso, además de a viviendas, al Grupo de Cultura Covadonga y al campo municipal de Las Mestas.

El jefe del Servicio de Parques y Jardines detalla en su informe, de manera previa, que la gestión del arbolado «no es una cuestión que se resuelva en cortos plazos» y que exige realizarse «con mucha antelación». Así, menciona que «el modelo de gestión consistía en realizar fuertes podas periódicas reduciendo la copa para mejorar su estabilidad, pero depreciando enormemente el valor ambiental y ornamental y generando grandes heridas que provocan el efecto contrario a medio plazo, al producir grandes pudriciones internas y la disminución paulatina de la resistencia mecánica del arbolado provocando cierto riesgo».

No adecuados para viarios

En su argumentación, Juan Carlos Martínez estima que «los chopos no son especies adecuadas para viarios dado su tamaño adulto y la fragilidad de su madera, con especial incidencia imprevisible de la caída fisiológica de ramas en verano. En los últimos veintisiete años no se ha plantado en la ciudad ningún ejemplar de chopo en espacios públicos y menos en viarios». Con todo, menciona que los chopos de la calle de Jesús Revuelta «hace ya mucho tiempo que perdieron las características que podrían haber tenido en el momento de la plantación, debido a las podas severas y al propio proceso de envejecimiento, máxime cuando están dentro de los grupos de árboles de rápido crecimiento y vida corta, que hace que se estime la vida ornamental segura en aproximadamente ochenta años». Juan Carlos Martínez, además de hacer constar la continua vigilancia sobre este arbolado concreto conocida su peligrosidad, menciona un buen número de actuaciones y de incidencias por caída de ramas, incluidas denuncias de conductores e intervenciones de la Policía Local y de los bomberos.

A modo de conclusión y aun reconociendo lo complejo de plantear una tala completa, el responsable de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Gijón cita que «los árboles son seres vivos que están sometidos a los avatares biológicos inherentes a su condición y inevitablemente se ven abocados a la muerte. En los parques públicos y con mayor razón en los viarios, no es posible mantener su ciclo vital al completo, incluyendo su decrepitud y la muerte, dado que debe primar la seguridad de las personas y los bienes».

Por todo ello, desde el Servicio de Parques y Jardines se considera que la tala completa de los árboles del acceso a Las Mestas es una medida inevitable en estos momentos y que redundará en la seguridad de las personas, planteamiento que, a entender de su responsable, no ofrece duda alguna.