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Óscar Cuervo
Martes, 28 de octubre 2014, 00:16
«Sacáime bien, ¡eh!». Quien suscribe estas palabras no puede ser otro que el carismático actor Arturo Fernández que ayer fue homenajeado por la Asociación de Mayores del Partido Popular de Gijón con una cena que tuvo lugar en el restaurante Avant Garde, ubicado en los bajos del Hotel NH.
Elegante y haciendo gala de su gran simpatía el intérprete se mostró encantado con el hecho de volver a la tierrina. «Cualquier momento es bueno para estar en mi Gijón del alma. Siempre estoy dispuesto a venir a Asturias, da igual para lo que sea. Tanto para ser pregonero en Cimadevilla como para presentar el Festival de Cine de Gijón (FICXixón), como hice hace ya muchos años», señaló Fernández, quien lleva siete semanas interpretando en Madrid su papel de sacerdote en la obra 'Enfrentados', que estuvo en Gijón este mismo verano.
No se olvidó el actor de cumplir con su etiqueta de galán. «Porque cualquier motivo es bueno para estar en esta ciudad, como comer fabada, o ver a estas mujeres tan guapas», agregó para la carcajada generalizada y sin importar que allí mismo estuviese también presente su pareja Carmen Quesada.
«¡Ay mi madre, Arturín!»
El actor llegó al restaurante unos minutos antes que la presidenta del PP asturiano, Mercedes Fernández, quien expresó su sorpresa al ver al homenajeado con un «¡ay mi madre, Arturín!». Tanto ella como Ángeles Fernández-Ahúja (diputada nacional y expresidenta de la junta gestora de PP de Gijón), José Luis Valladares (responsable de la Asociación de Mayores del PP local) y David González Medina (presidente de los populares gijoneses) destacaron el amor del actor hacia Gijón. «Es nuestro mejor embajador», dijo Medina, quien hizo hincapié en que «Arturo ha conseguido lo que tiene a base de trabajo, esfuerzo y tesón, no por ponerse detrás de una pancarta con un megáfono o un dedo en la ceja para tomar ventaja».
El secreto
Galán y caballero. Fueron sin duda los dos adjetivos que más se escucharon durante el acto de ayer. Pero, ¿cuáles son sus secretos? «No los digo, que hay mucha competencia», respondió socarrón. «Para ser galán no hace falta ni más ni menos que ser un actor con un físico agradable. Además, estoy acostumbrado a conquistar desde el escenario gracias a lo que escribe otro. Ese es el mérito», apuntó, al tiempo que enviaba un mensaje para la gente de su edad -cumplió 85 años en febrero-. «La RAE nos considera mayores a partir de los 70 años, pero viejo solo es quien quiere serlo», subrayó.
Más allá de las bromas, el intérprete aseguró que «lo peor para un actor es caer en el olvido, pasar desapercibido» -algo de lo que no puede preocuparse visto el cariño recibido- y se puso serio para hablar de los últimos casos de corrupción. «Es una epidemia que se deja ver cada dos o tres días. Me asombra, me causa malestar. Hay corruptos en todas las ideologías. Siempre he votado al PP porque creo que ofrece un gobierno serio y muy bien preparado, desde José María Aznar hasta Mariano Rajoy», indicó.
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