Una fiesta del Grupo pondrá el punto final a la historia del Oasis

Los grupistas pondrán el punto final a la actividad en el Oasis. La veterana discoteca gijonesa celebrará el día 29 de este mes su última fiesta, que pondrá el broche de oro a una historia que se iniciaba allá por 1954, cuando se abría la sala de fiestas en la Ería del Piles; la discoteca inició su andadura unos años después, en 1968.

Ahora, en el tramo final de su existencia, la discoteca Oasis ha dejado en manos del Grupo de Cultura Covadonga la fiesta que cerrará décadas de celebraciones. Será con una gran verbena que la polideportiva sociedad gijonesa celebrará el último viernes de este mes.

El propietario de este equipamiento de ocio, Emilio Garciablanco del Val, quien además es a día de hoy el socio número 1 del Grupo, despedirá de esta manera una discoteca que, una vez cierre sus puertas para siempre, será demolida. En los terrenos que ahora ocupa el Oasis se construirá un McAuto similar al que la multinacional de hamburgueserías McDonald ya tiene junto a la gasolinera de Foro. De los 2.500 metros cuadrados sobre los que se levanta el Oasis, el futuro restaurante de comida rápida con servicio para automóviles sólo utilizará unos 600. De este modo, todavía quedará espacio suficiente para ubicar otros usos complementarios en esta zona.

Garciablanco del Val ya da por amortizado el equipamiento, que vivió su época dorada en las décadas de los años 80 y 90, unos años en los que las discotecas de Gijón se habían constituido como un referente en el Norte de España.

Recuperación fallida

Sin embargo, los últimos intentos por reflotar el Oasis no dieron los frutos deseados, como la fallida reinauguración en verano de 2012, cuando se trató de convertir a esta instalación en una discoteca 'low cost' para mayores de 18 años y de acceso libre. Lejos quedaban ya aquellas fiestas de espuma que marcaron los veranos gijoneses o las fiestas universitarias para recaudar fondos con los que emprender viajes estudiantiles, sin olvidar sus celebraciones en Nochevieja en una época en la que el Oasis quedaba a tiro de piedra de la zona de marcha juvenil, que entonces se concentraba en el barrio de La Arena.