El club de tiro Ensidesa teme su cierre por una futura carretera de la ZALIA

Una injusticia que, además, saldrá muy cara al contribuyente. Eso es lo que Eduardo Fernández, presidente del club de tiro Ensidesa, y su directiva creen que está sucediendo en estos momentos con la entidad a la que representan. Creían tener solventado y prácticamente olvidado el asunto, pero una casualidad les ha devuelto a la realidad. «Estábamos consultando el trazado del gaseoducto que conectará El Musel y Llanera cuando llegó a nuestro conocimiento que seguía adelante el trazado realizado en 2010 de la carretera de la ZALIA, que pasará por aquí al lado». Tan cerca, que obligaría al club a cerrar tres fosos de tiro olímpico, una galería de 200 metros de largo -solo hay otra igual en Huesca- y un campo IPSC -donde practican, al menos dos veces al año, los diferentes cuerpos de seguridad del Estado-. ¿El motivo? No se respetarían los 200 metros mínimos de seguridad obligatorios.

Para ellos, la solución es muy sencilla. Incluso, mapas en mano, apuntan hacia un nuevo trazado, que fue elaborado en 2013 por la Consejería de Fomento, la misma que confeccionó el plan de 2010 y que conllevaría el cierre de una gran parte de las instalaciones de tiro. El proyecto de 2013, además de toda la cartografía, está actualmente en poder del área de Urbanismo municipal. Este nuevo trazado permitiría mantener abiertas todas las instalaciones de la entidad, pero el Principado decidió no aceptar.

Según explicaron a este periódico, «el director general de Infraestructuras y el jefe de servicio de Conservación», con los aseguraron haberse reunido el martes, «reaccionaron con nerviosismo al contemplar el mapa de 2013, amenazando con penas de cárcel a la persona que, según dijeron, nos lo hubiese filtrado». «Nos intentan hacer ver que lo válido es lo aprobado en 2010, sin ni siquiera intentar buscar soluciones a lo que estamos planteando. Insisten en que el mapa nuevo no tiene validez», agrega Eduardo Fernández.

Ordenados de forma cronológica, en realidad son cuatro los tramos que, en función de los planos que maneja la entidad, se han planteado para esta zona. En 2007, en un recorrido sin rotondas, se propone un vial que no afectaría al club. En 2010, se plantean dos, a cada cual más perjudicial, optándose por el 'menos malo' para el club de tiro. En 2013, pese a que el Principado no le otorga validez, se confeccionó otro con diferentes rotondas, que también permitiría sobrevivir al club Ensidesa. «Solo habría que mover una torre de alta tensión. En el otro caso, habría que hacer lo mismo con unas cuantas más», apunta visiblemente molesto Fernández, quien insiste en que los costes para el tramo que plantea el Principado serían muy superiores a los que conllevaría el que defienden desde el club Ensidesa. «Habría que pilotar -poner pilares bajo el vial- parte de la carretera ya que parte del trazado discurre sobre una balsa con vertidos tóxicos que fue sellada. Los costes se dispararían, pero no solo por eso. También habría que rellenar muchísimo terreno, mucho más que con el trazado nuevo», defiende.

A ello, indicaron «habría que sumar la pérdida de los empleos de dos camareras y una cocinera que trabajan en la sede social, además de otros dos previstos para el mantenimiento de las instalaciones». «También los costes indirectos, como poner punto final al ocio de 687 socios y los gastos en armería y hotelería que nosotros generamos. Cada año se alojan en la ciudad unas 50 o 60 familias gracias a nosotros, además de otras 120 por la disputa de una prueba de la Copa del Rey». Es por ello que se preguntan «a cambio de qué» ha decidido el Principado mantener el trazado que denuncian. Si nada mejora, el club Ensidesa no descarta movilizaciones.