Tamara Falcó hereda de su padre el título de marquesa de Griñón

Para evitar problemas legales, Carlos Falcó hizo una cesión en vida, introduciéndolo como una adenda en su testamento y contando con la aprobación del Rey. Las cosas se han hecho bien, ya que Manuel, el primogénito hereda el título de mayor importancia, y Tamara, el familiar que fue otorgado por primera vez el 25 de febrero de 1862 por la reina Isabel II.

Fuentes cercanas a la familia aseguran que el reparto de la herencia ha sido equitativo y que todos están conformes con la última voluntad del marqués. Este fue incinerado el 25 de marzo en el crematorio Sur de Madrid en una ceremonia íntima debido a las medidas de prevención decretadas por el estado de alarma. Cuando la situación vuelva a normalizarse sus cenizas serán esparcidas en su finca Casa de Vacas, en Toledo.

Fue precisamente la hija de Isabel Preysler -segunda mujer del marqués- quien quiso agradecer las muestras de cariño recibidas a través de las redes sociales en las que le dedicó un emotivo mensaje de despedida: «Nuestro padre fue una persona excepcional, que amó a su país y trabajó por él sin descanso, como agricultor y productor de vinos. Fue un idealista, bueno y generoso con sus hijos y amigos y estará siempre vivo en nuestra memoria».