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Los novios llegaron exultantes al campo de La Garita en un carro del país engalanado con hortensias.

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Los novios llegaron exultantes al campo de La Garita en un carro del país engalanado con hortensias. FOTOS: ÁNGELA RODRÍGUEZ

Sergio G. Sánchez sella su amor en La Regalina en una boda asturianísima

Amigas como Belén Rueda y Pasión Vega arroparon al cineasta y a su pareja, el músico de la OSPA Francisco Mestre, en su emotivo enlace

ÁNGELA RODRÍGUEZ

VALDÉS.

Domingo, 16 de octubre 2022, 02:46

A la espera de la llegada de la Familia Real, dentro de quince días, para la entrega del Premio al Pueblo Ejemplar, el bucólico paisaje de La Regalina, en Cadavedo (Valdés), recibió ayer a otros invitados muy especiales. Y es que la boda del director de cine y guionista ovetense Sergio G. Sánchez y el músico Francisco Mestre congregó en el precioso campo de La Garita a cerca de doscientos invitados, entre los que se encontraban rostros tan populares como los de la actriz Belén Rueda y la cantante Pasión Vega, amigas de los novios.

Con el murmullo del mar de fondo y al son de las románticas melodías de un quinteto de cuerda -arpa incluida-, los invitados llegaron caminando con varas en las manos, desde la Reserva de los Campos, donde luego se realizó el convite. Una alegre comitiva que alcanzó La Regalina pasado el mediodía y que esperó ilusionada la llegada de los novios en un carro tirado por bueyes. Ellos, exultantes, no dejaron de sonreír ni un minuto, dejando claro que esa es la tónica de su sólida relación. «Por si acaso nuestra llegada en un carro de bueyes no era suficiente declaración de intenciones, queremos que esta sea una ceremonia muy real y muy sentida. Todo tiene un significado importante para nosotros. Lo más importante es que estéis todos aquí y lo disfrutéis», declaró Fran ante los presentes.

Titulado por la Escuela Superior de Música de Cataluña, el músico es contrabajo principal en la OSPA, habiendo colaborado también con filarmónicas como la Jove Orquestra de la Generalitat Valenciana o la Joven Orquesta Nacional de España. «Fran escogió el contrabajo, el camino más difícil. Fue a Barcelona, a Berlín... Se dice que los músicos encuentran el amor en otros músicos, pero vosotros habéis encontrado vuestra manera de encajar. Brilláis y, cuando os juntáis, necesitamos gafas», aseguró Diego Mestre, hermano de Fran, arrancando las carcajadas de los novios. «Os deseo eso que ya tenéis: respeto, alegría y amor. Os deseo de corazón que sepáis conservarlo y que trabajéis para mantenerlo», añadió.

Algo más nervioso que su pareja, Sergio G. Sánchez aseguró, en sus votos, ser «mejor persona al lado de Fran». «Es una persona tan buena que me da luz cuando yo tiendo a la oscuridad», confesó el cineasta, arrancando alguna que otra lágrima entre los invitados. Luz que también lo acompaña en lo profesional, porque fue ganador del Goya al Mejor Guion Original en 2008 por 'El Orfanato' y estuvo nominado también, en la misma categoría, en 2013, por el laureado largometraje 'Lo Imposible'. En 2018, la nominación llegó en la faceta de director, por su ópera prima, 'El secreto de Marrowbone'.

«Está todo precioso. Qué buen ambiente, una maravilla», comentaban los vecinos que se acercaron al campo de La Garita durante la ceremonia. No eran pocos, y es que a la curiosidad por ver en persona a quienes suelen ver en la pantalla se sumaba la atracción por presenciar «la primera boda gay junto a la ermita de La Regalina». Un enlace sencillo y asturianísimo, con tradicionales ramos de alfiladas en lugar de centros florales, pacas de paja a modo de bancos y la bóveda azul del cielo y el mar como templo. «Menos mal que al final no llovió», suspiró el guionista, risueño y ya más relajado de la mano de su flamante marido, tras un ensordecedor «¡Vivan los novios!».

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