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La artista catalana Rosalía continúa con su gira 'Motomami World Tour', su última parada ha sido en Nueva York y precisamente ahí fue donde uno de sus fans ha descubierto un nuevo tatuaje cargado de significado para la autora de 'Despechá'. Sus seguidores no han tardado en darse cuenta que se trata de una frase de la canción de Manuel Molina 'Que nadie vaya a llorar el día que yo me muera, es más hermoso cantar aunque se cante con pena'. todo un símbolo del flamenco.
Es una canción que compuso en 2014 este artista y Rosalía incluyó dentro de su tracklist para su gira del disco 'Los Ángeles' en 2017 cuando aún no tenía fama internacional. La canción no formó parte de ningún disco. el cantante la interpretó por primera vez durante un concierto en Nerja, Málaga.
Rosalía tiene numerosos tatuajes. En el reverso de las manos, por ejemplo, tiene las falanges de los dedos llenos de tinta. También ha explicado que se ha tatuado «'Motomami' para celebrar la gira»; en los cuatro dedos de una de las manos, salvando los pulgares, lleva 'moto' y en los de la otra, 'mami'. Otro de los tatuajes que ha compartido con sus seguidores es una doble 'R' la en la planta de su pie izquierdo.
.@Rosalia se ha hecho un nuevo tatuaje en la espalda:
Rosalía Sources (@RosaliaSources) September 21, 2022
"Que nadie vaya a llorar el día que yo me muera, es más hermoso cantar aunque se cante con pena" pic.twitter.com/D38g3wMNI6
Manuel Molina, o 'el tío Manuel', alcanzó el éxito gracias a su faceta de compositor, guitarrista, cantaor e impulsor del flamenco fusión. Junto con su exmujer Lole Montoya formaron el dueto Lole y Manuel en 1972.
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Publicaron más de cinco álbumes, como por ejemplo Nuevo día - El origen de una leyenda (1975), Pasaje del agua (1976) o Lole y Manuel (1977). En 1975 se casaron y fueron pareja artística y sentimental durante muchos años. A partir de 1993, debido a su separación matrimonial, Dolores Montoya desarrolló su actividad artística de forma independiente
Es un matrimonio con una descendencia muy talentosa, ya que su hija, Alba Molina, grabó en 2019 una versión de 'Que nadie vaya a llorar'. Lamentablemente Manuel murió en San Juan de Aznalfarache, Sevilla, el 19 de mayo de 2015.
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