El reto de Verdeliss, la madre de ocho hijos que quiere ganar siete maratones en siete días

Muy pocos niños en el mundo pueden presumir de tener una madre capaz de correr siete maratones en siete días en Antártida, África, Australia, Asia, Europa, América del Sur y América del Norte. En solo unos días los ocho hijos de Estefanía Unzu, más conocida como Verdeliss, podrán hacerlo. La atleta e 'influencer' navarra está inmersa en el reto World Marathon Challenge, uno de los desafíos más duros de este deporte. La competición comenzó el pasado viernes y finalizará este jueves. Hasta el momento la española ha ganado cinco carreras.

A sus 39 años, Verdeliss acumula 1,5 millones de seguidores en Instagram, donde cuenta su día a día como madre de ocho hijos: Aimar (2005), Irati (2010), Laia (2011) y Julen (2014), Anne y Eider (2016), Miren (2018) y Deva (2022). También comparte sus duros entrenamientos gracias a los que pudo alzarse con el título de campeona de España absoluta en la categoría de 100 kilómetros.

Que la 'influencer' es una inconformista es un hecho y así lo demuestra este duro desafío que comenzó el pasado 31 de enero en la Antártida, uno de los lugares más extremos del mundo y en el que Verdeliss se impuso en la categoría femenina con un tiempo de tres horas y 38 minutos. «Las bajas temperaturas eran mi mayor miedo... y wow, sí que es difícil correr por la nieve. Mucho peso con la ropa, respiras aire helado y las piernas te hacen un esfuerzo titánico... a ratos te resbalas con el hielo, a ratos te hundes en la nieve. Pero el mayor desafío es el trabajo mental. Sólo ves el desierto blanco y escuchas un infinito silencio. ¡Durante 10 vueltas!», contaba la atleta tras completar la carrera.

Una vez finalizada esa maratón, tocaba viajar a Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. Allí no solo ganó la categoría femenina, sino que también se impuso en la general con un tiempo de tres horas y 10 minutos. «Y 14 horas después de correr en la Antártida estábamos en la línea de salida de Ciudad del Cabo. Supongo que podíamos descansar en el avión (5:30 de vuelo) pero creedme que lograr hacerlo con el ruido y la incomodidad del avión 'militar' lo hacía imposible. Con cero unidades de sueño, no confiaba mucho en mi cuerpo... así que estoy contenta. No llevé mal el calor, me divertí y aunque empiezo a notar las piernas cansadas, no me duele nada. Mi único malestar es que tengo la piel carbonizada... las prisas no son buenas consejeras y olvidé aplicarme el protector solar«, explicaba.

De África Verdeliss viajó a Australia. En Pert volvió a alzarse con la medalla de oro con un tiempo igual al del día anterior, pese a que el cansancio ya había comenzado a hacer mella entre algunos participantes. «Un club de rugby de Perth fue nuestro 'campamento base' donde ducharnos, repostar comidas y a marchas aceleradas regresar al aeropuerto. Empiezo ya a ver muchas bolsas de hielo, rollers, cintas kinesio, analgésicos... hasta un atleta haciendo la maratón en muletas!!! Esto es muy fuerte, sigo cruzando los dedos por mantenerme fuerte», relataba.

El cuarto día Verdeliss recortó un minuto al crono para volver a imponerse en Dubai en ambas categorías, eso sí, en esta ocasión tuvo que hacer frente a algunas dificultades. «Primera en mujeres y primer puesto de la general con un tiempo de 3:09. Será verdad eso de que en las adversidades saco la leona que llevo dentro. Lo pasé regulinchi por un revoltijo estomacal, pero remonté tras el 'pit stop' al baño... y lo imposible sucedió: mejor marca en Dubai. Lo sufrí, amiguis, y me emocioné. Ahora sí, los cuádriceps me han puesto en sobreaviso del esfuerzo sobrehumano, veremos cómo responden a la carga de un circuito como el Jarama y sus desniveles. Pero, ey! Llegó España y sentirme arropada por mi gente, seguro que se siente un chute de motivación», celebraba.

En la antepenúltima maratón Verdeliss jugaba en casa y eso se notó. La 'influencer' pudo sentir el calor de su familia, que no dudó en celebrar su quinta victoria en la categoría femenina, la cuarta en la general.

Ya solo le quedan dos maratones para lograr su gran hazaña.