Dicen que los ojos no mienten porque son el espejo del alma y más ahora en un mundo en el que las mascarillas se han apoderado del protagonismo de las sonrisas y han convertido la mirada en el rasgo con más poder expresivo. ... Así que los ojos son ahora esa ventana al mundo que puede ser capaz de transmitir una apariencia determinada, pero ¿Qué pasa cuando los párpados caídos, las arrugas, las patas de gallo o las bolsas y ojeras entran en juego? ¿Cómo conseguir que nuestra mirada no se vea triste y cansada como resultado del envejecimiento de la piel? Sobre todo esto hemos hablado con la maquilladora de MAC Sara Zalop.
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Esta maquilladora asturiana, además de encargarse durante sus siete años de experiencia de dar vida a muchos de los maquillajes de las novias e invitadas asturianas, también ha llegado a maquillar a rostros tan conocidos como Kira Miro y a trabajar en numerosas campañas de moda, publicidad y pasarelas. Sara Zalop se declara a sí misma «en contra de los estereotipos y a favor de la naturalidad», un respeto por la belleza natural que transmite a la perfección en todos y cada uno de sus maquillajes y que asegura es lo que más le ha «enganchado» de esta profesión: «El maquillaje es esa oportunidad de potenciar la belleza natural de las personas, de sacar partido a esas líneas de expresión, arrugas, manchas, ojeras… Esos rasgos que tan a menudo denominamos 'imperfecciones' pero que también pueden ser bonitas», asegura.
Esto mismo es lo que transmite también en los maquillajes de ojos y sin importar si lo que vamos a maquillar es un ojo con párpados caídos, con bolsas y ojeras o con líneas de expresión: «Un buen maquillaje de ojos siempre nos va a potenciar mucho más la mirada, por eso es importante centrarse en el tipo de ojo que vamos a maquillar y siempre recurrir a ese tipo de maquillajes con los que nos sintamos a gusto y guapas», explica la asturiana.
Algo a lo que añade que potenciar esas zonas del ojo que más nos gusten, siempre restará importancia a esos pequeños defectos que podamos ver: «Si tenemos una ojera muy marcada, una buena forma de disimularla siempre puede ser potenciando por ejemplo las pestañas o resaltando las cejas, que a pesar de que antes había mucha gente que no se las maquillaba, ahora con el uso de las mascarillas cada vez son más las que se animan a maquillar las cejas para resaltar la mirada», asegura. «Hay que centrarse en la virtud más que en el defecto», añade.
Aún así Sara Zalop tiene claro que hay una serie de trucos que siempre pueden convertirse en los mejores aliados a la hora de rejuvenecer una mirada. ¡Te los contamos!
Potenciar pestañas: Potenciar las pestañas siempre hará que nuestra mirada se vea más abierta por lo que Sara Zalop recomienda «usar siempre rizador, alguna prebase para dar más largo y grosor a la pestaña y una buena máscara de pestañas que nos de volumen, largo y también rizo».
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Evitar sombras metalizadas en párpados caídos: Los párpados con arrugas o caídos, aunque no siempre están vinculados a la edad, sí que suelen tender a decaer con el paso de los años por lo que a la hora de maquillarlos conviene tener en cuenta una serie de trucos como el de evitar las sombras metalizadas: «Si nuestro párpado tiene muchas arrugas y no queremos que se potencien deberíamos recurrir a sombras más mates y evitar sombras metalizadas o muy brillantes, ya que este tipo de sombras tienden a marcar más la textura de la piel en esas zonas y marcan aún más las arrugas».
Delineado en punta de flecha: También asegura que aunque pueda parecer más complicado «el delineado puede adaptarse a cualquier tipo de ojo» y lo mismo en el caso de los párpados caídos, para los que entra en juego «el delineado terminado en punta de flecha»: «Esta técnica de delineado hace que al abrir el ojo se vea el delineado totalmente limpio, mientras que al cerrar resalta esa especie de punta de flecha donde se unen los párpados».
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Toques de luz estratégicos: En cualquier tipo de ojo es importante resaltar los puntos de luz en zonas estratégicas, algo que además de iluminar la mirada siempre la resalta. «Sobre todo podemos dar toques de luz con ayuda de una sombra clara o con un iluminador en la zona del lagrimal y debajo del arco de la ceja», explica.
Texturas ligeras e hidratantes para la ojera: Aunque siempre se puede neutralizar la oscuridad de la ojera con un poco de corrector, Sara Zalop insiste en «evitar ponerse tonos blancos o muy claros porque de esta manera solo conseguiremos el efecto contrario, es decir resaltaremos aún más la ojera». Sobre esto advierte que «es mejor neutralizar la ojera y no cubrirla totalmente» para conseguir un «efecto más natural»: «Es preferible que se siga viendo ligeramente la ojera cubriéndola con texturas ligeras y cercanas a nuestro tono de piel, sobre todo si hay mucho pliegue en la ojera. Después solo tendremos que asegurarnos de fundirla muy bien con la base de maquillaje».
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Se fiel a ti misma: Este es uno de los trucos imprescindibles y que la asturiana siempre defiende a capa y espada en cualquier maquillaje: «Al final lo importante es maquillarte como más te guste, como te veas tú misma y como te sientas la reina de la fiesta» , remata.
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Alba Llano Olay
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