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La mañana de este miércoles empezó con nervios, especialmente, para la diseñadora asturiana María Lafuente. A ella le tocó abrir la apasionante programación de la pasarela 'Off' de la Madrid Fashion Week, en la sede del Comité Olímpico Español. Y lo hizo con esa fuerza que la caracteriza, presentado su colección 'Inefable'. Esta es la línea de otoño e invierno para el próximo año, en la que sus modelos estuvieron precedidas de una actuación brillante de la Joven Compañía de Danza de Castilla y León. Estos chicos interpretaron la coreografía 'Miradas en blanco', que es un manifiesto contra la violencia de género.
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Sus pasos de baile desgarradores dejaron paso a los vítores y a un desfile de diseños de lo más coloridos, en los que hubo tanto prendas para mujeres como para hombres. Predominaron los naranjas, azules y morados, en unas piezas con volúmenes llamativos -algunos impresos en 3D-, que combinaron tanto los vestidos largos como las apuestas más minifalderas.
Hubo, entre sus prendas, hombreras, moulage, corsés y cortes asimétricos, que se ganaron el aplauso rotundo de una sala que estaba abarrotada de gente. Un público con ganas de ovacionar a Lafuente y de aplaudir también el trabajo de todos los modelos, entre los que había tres asturianas: Blanca Picato, Paula Argüelles e Irene Sánchez Fonseca. Aunque el maniquí que más curiosidad despertó fue Gianmarco Onestini, el exconcursante de 'Gran Hermano VIP'. Él lució un traje en tonos fucsias que causó sensación entre los allí presentes y también en las redes sociales.
La jornada continuó con otros desfiles como el de Ángel Schlesser, cuyo director creativo es el ovetense Alfonso Pérez, mucho más conocido como El Costurero Ecléctico. Esta marca presentó, en el Edificio Larra, su colección 'Femme', que está inspirada en las fragancias y los perfumes de la marca. De esa manera, el público pudo ver este miércoles prendas en amarillos, berenjenas, marrones, azules, verdes y hasta blancos y negros que pretendían recordar a los tonos de las flores que se utilizan para hacer las colonias de la firma. Hubo además gasas, abrigos largos y lanas, que resaltaban las figuras de las modelos, sumamente femeninas.
Y este miércoles la presencia asturiana terminó, en la Fashion Week de Madrid, con el desfile de Pertegaz, cuya marroquinería corre a cargo del gijonés Héctor Jareño. Esta firma presentó prendas en tonos bastantes neutros como el granate, el violeta y el beige, que combinaban a la perfección con los complementos en piel del asturiano.
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Jareño se permitió, en esta ocasión, jugar con colores como el amarillo, el fucsia y el azul, aunque también hubo hueco para los clásicos como el marrón y el negro, dando como resultado una colección de piezas sumamente elegantes. Esos complementos, al lado de los estampados y de los cortes tradicionales de la marca, dieron como resultado una apuesta que evocaba a los años sesenta. En la sede de la calle General Castaños, Pertegaz triunfó como lo hará el domingo otra firma con origen asturiano, 93 Sierra/Crosses, de Oliver Iglesias.
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