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elcomercio.es
Viernes, 12 de febrero 2016, 04:32
Salma Hayek se propinó un fuerte golpe en la cabeza durante el rodaje de Drunk Parents, la comedia que protagoniza junto a Alec Baldwin y Joe Manganiello, y el accidente fue lo suficientemente grave como para evacuarla inmediatamente a urgencias. «Desgraciadamente, el vestuario de la escena era completamente inapropiado para el hospital», ha admitido la actriz, que ha compartido en Instagram una fotografía en la que posa junto a los médicos que la atendieron, los felices doctores Foster y Ellspermann.
Efectivamente, su camiseta -uno de esos trampantojos con el dibujo de un torso desnudo y unas manos sobre los pechos- no parece lo más indicado para acudir a un hospital, ni prácticamente a ningún otro sitio. «Y no se preocupen, que quedé igual de loca que antes», tranquiliza la intérprete, que ya tiene acostumbrados a sus seguidores a su desinhibido sentido del humor: estos días también ha difundido una imagen en la que aparece arreglándose a las cinco de la mañana, con unos parches en los párpados.
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