Borrar
Pablo Vélez, Noelia García y Xurde, rodeados de pites.
Un ecosistema pensado diferente

Un ecosistema pensado diferente

PitaSana, además de comercializar huevos ecológicos, rescata la vida de pueblo. Ahora celebra el Premio Serondaya de Gastronomía

J. M. P.

Jueves, 19 de diciembre 2019, 13:43

La urgencia por rescatar las zonas rurales no es nueva. Muchos espacios llevan décadas reclamando atención en base a las posibilidades que ofrecen pero parecen querer obviarse. Noelia García y Pablo Vélez nacieron en Boal y Serandinas, respectivamente, y en 2012, empezaron a gestar un proyecto que les devolvió a casa. Sus ideas desembocaron dos años después en PitaSana, una granja de avicultura alternativa, integral y diversificada que, aunque se sustenta en los huevos y les pites, va mucho más allá.

PitaSana es como un ecosistema perfecto radicado en Armal, en el concejo de Boal. Un millar de pites viven a lo largo y ancho de tres hectáreas paseando casi por donde quieren rodeadas de manzanos y huerta. Llevan una dieta muy equilibrada por la que «comen la verdura que nosotros plantamos, berza, sobre todo, germinados, leguminosas, fruta y pastan a su ritmo comiendo cualquier tipo de bicho. Además, les damos un aporte extra de proteína que conseguimos con cereales ecológicos certificados que compramos en Castilla», detalla Noelia García. Así luego ponen unos huevos que tienen el sabor y hasta el color de siempre y eso, aunque parezca lo lógico, hay que reseñarlo. Llevan el sello que los confirma como ecológicos.

García, Vélez y el hijo de ambos, el pequeño Xurde, son el motor de todo. Ellos atienden a todos los animales, así como los praos, las hortalizas y los frutales. Buena parte de su tiempo va para les pites, les fabes ecológicas y la comercialización de setas shiitake. La familia también se encarga de las cuentas y de los repartos, porque aunque PitaSana esté localizada en el occidente, sus productos alcanzan toda Asturias.

PitaSana es muchas cosas y, entre ellas, un lugar donde aprender, pues desarrolla un proyecto paralelo de educación agroecológica a través de la organización de talleres, aulas de naturaleza y visitas guiadas a la explotación ubicada, por cierto, en pleno parque histórico del Navia. Los visitantes pueden desde recolectar frutas hasta cuidar de la huerta o dar de comer a los animales. Experiencas todas ellas que ayudan, en definitiva, a retomar la vida en los pueblos, y eso siempre viene bien.

Su labor tanto comercial como empírica ha hecho a PitaSana merecedora del Premio Serondaya de Gastronomía, cuyo jurado estuvo conformado por Queta Gutiérrez Tuñón, 'Viri' Fernández García, Luis Alberto Martínez Abascal, Ángel M. González -director adjunto del diario EL COMERCIO-, y Aránzazu Valladares López-Pardo, actuando como secretario, con voz y sin voto, Fulgencio Argüelles.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio Un ecosistema pensado diferente