Las huertas asturianas aún tienen tomates. La fruta que una ley estadounidense convirtió en hortaliza y que, en cocina, permite una gran variedad de elaboraciones teñirá nuestras huertas hasta noviembre en el mejor de los casos. Aquí tiene dos recetas para aprovechar la temporada antes de que sea demasiado tarde.
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Tomates gratinados
Ingredientes
Cuatro tomates
50 gramos de queso rallado
Ajo, perejil y miga de pan
Sal y un poco de azúcar
Elaboración
Se parten los tomates por la mitad tras lavarlos y se colocan en el horno. Antes, se sazonan al gusto y se les añade un poco de azúcar y un chorro de aceite de oliva. A continuación, pique cuatro dientes de ajo y algo de perejil y mézclelo con la miga de pan y el queso rallado. Cubra los tomates con esta mezcla y eche más queso por encima. Déjelos unos 20 minutos en el horno para que se doren.
Mousse de tomate y albahaca
Ingredientes
5 tomates
Dos cucharadas de mahonesa
200 mililitros de nata para cocinar
Un diente de ajo
Albahaca, sal y pimienta negra
Elaboración
Corte por la mitad los tomates que, previamente, ha lavado. Después, páselos por la batidora y, acto seguido, haga lo mismo con el ajo. Incorpore a la mezcla la nata y la mahonesa. Eche la sal y pimienta que desee y déjelo en la nevera unas dos horas. Cuando esté, disfrute de esta mousse en una tosta o con un poco de queso, por ejemplo.
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