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FéminAs han sido tres días de incesante actividad cargada de fondo. Todas las ponentes del Primer Congreso de Gastronomía, Mujeres y Medio Rural compartieron su historia y mostraron producto y cocina, pero sobre todo dejaron mensajes. La jornada del miércoles, la de clausura, centró ... el foco en el sector primario, y lo que dijeron sus participantes se llevó más de un arranque de aplausos.
Esther Manzano ejerció de anfitriona de la comitiva reunida en el Palacio de Rubianes e inauguró la jornada compartiendo 'Mi vida, mi cocina'. Los orígenes de la cocinera Michelin asturiana motivó la ponencia y el posterior cocinado en directo. Esther contó que creció del lado del sector primario, sobre todo cerca del campo y los animales, sumando luego la mar. La vinculación la mantiene, lo que le permite ser una de las grandes embajadoras de la materia prima asturiana. Para demostrarlo, cocinó con fabes, llámpares y xirgu.
El micrófono lo cogieron después responsables directas del sector primario, encargadas de la revolución silenciosa que están viviendo el campo y la mar. La ganadera asturiana Lucía Velasco, la responsable de la finca ecológica La Garita, donde hay animales y huerto, Eva Saluño, y la pescadera y mariscadora gallega Rita Míguez abordaron lo que hacen, por qué lo hacen y, sobre todo, la realidad de su mundo. Que se cuide el medio ambiente, que se ayude a retener talento en los pueblos con medios y, ante todo, interés, que se consuma buena materia prima y se aprenda a reconocerla y que se valore como tal con precios justos. Estos fueron algunos de los mensajes lanzados y que calaron hondo entre los presente.
Lucía Freitas es cocinera, pero también es productora y trabaja huerto propio. Cocinó para demostrarlo, convencida de la otra manera de inculcar que hay que comer verduras porque «no todas valen, hay que saber de dónde vienen y cómo se consiguieron». La gallega recordó que el mejor tomate no es el más bonito y que hay que invertir en lo realmente importante, la salud. Freitas, tras cocinar con productos de su huerto, recordó la necesidad de garantizar la conciliación. En su restaurante no entra un menú largo a partir de las 21.30 horas. Lo hace por su equipo y porque «yo, como cocinera y empresaria, tengo en mi mano poder cambiar las cosas. Es el momento. La pandemia me cambió la vida». La italiana Viviana Varese enseñó su cocina y la esencia de Sicilia en una charla que ahondaba en volver a los orígenes. Ella, que está al frente del restaurante Viva (con estrella Michelin en Milán) presumió de la rica despensa de su país aprovechando que lo conoce bien de norte a sur.
La ronda final se tituló 'Liderazgo femenino en la gastronomía' y contó con la participación de Lourdes Plana, Susi Díaz, Pepa Muñoz y Sara Gómez Martín. Hablaron mucho de su papel en el sector, de lo que aporta la mujer al mismo (dosis extras de corazón y entendimiento), lo que consiste liderar y el valor de hacerlo con un equipo que vaya al lado. Para acabar, un mensaje: «Si queremos igualdad, no podemos separarnos. Nuestro liderazco es diferente y ahora es nuestro momento», dijeron.
La clausura contó con la intervención del presidente del Principado, Adrián Barbón, destacando los pilares sobre los que se sostiene el certamen: sostenibilidad, mujer y medio rural. Para despedir FéminAs no cocinaron ellas, sino ellos. Y todo en el concejo de Piloña, que puso la guinda al Primer Congreso de Gastronomía, Mujeres y Medio Rural, el cual sembró en Asturias la semilla perfecta.
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