El equilibrio, gestionar la diversidad, el liderazgo y la necesidad de cambios de horarios laborales y de vida fueron algunos de los aspectos que se debatieron en la mesa redonda 'Liderazgo femenino en la gastronomía'. Una charla, conducida por la periodista Laura Pintos, en la que todas las participantes coincidieron en que la pandemia ha llevado a una profunda reflexión de la que han salido, fundamentalmente, cosas buenas. «Para ser líder hay que sacrificarse mucho, ser humilde y tener visión de negocio», aseguró Susi Díaz, cocinera y propietaria del restaurante La Finca, en Elche, que matizó que «el camino es muy duro, pero las mujeres somos muy valientes aunque lo tengamos muy complicado y creo que vamos por el buen camino». Este camino también ha sido difícil para Lourdes Plana, presidenta de la Real Academia de Gastronomía, que considera que «la mujer tiene un sexto sentido, una visión más global para formar equipos y para ello la empatía y la sensibilidad es esencial». A su juicio, no obstante, hay que aprovechar las cualidades de hombres y mujeres.
Publicidad
De cómo ser líder, de las diferencias entre hombres y mujeres y de las distintas perspectivas y cualidades en este campo se debatió mucho. «Nadie es líder si no tiene un buen equipo», sentenció Sara Gómez, profesora e investigadora de la Universidad Politécnica de Madrid y directora del proyecto Mujer e ingeniería, que lanzó una pregunta: «Si no tienes un equipo ¿a quién vas a liderar?», pero no hay que «imponer sino compartir tu proyecto con tu gente y escucharles», y tener presente que no puede haber una sola tipología de personas sino hay que fomentar la diversidad y gestionar esa diversidad es lo más difícil.
Esencial es no confundir líder con jefe, afirmó Pepa Muñoz, que regenta el restaurante El Cuenco de Pepa y es presidenta de la Federación de Cocineros y Reposteros de España. «Cada vez hay más mujeres y no debemos separarnos sino ir de la mano», porque, apuntó Susi Díaz, «en solitario no se va a ninguna parte, pero hay que saber motivar y ser una piña».
Proximidad
Los cocineros buscan más el éxito y las mujeres se acercan a lo que les gusta y a definir sus raíces, por ello preservan sus raíces. Así lo manifestó Lourdes Plana que aprovechó para comentar que la pandemia ha cambiado la cocina, «hemos ido más a la de proximidad, a la de siempre, y se han modificado los horarios, una necesidad para poder seguir disfrutando de una profesión a las que a todas les apasiona pero que dificulta su día a día en el seno del hogar y en el cuidado de sus hijos.
«Llevo más de 30 años trabajando en esto y los horarios son terribles», se quejó Gómez, que cree que la pandemia ha venido a decirnos: «Tranquilos, la vida que lleváis no es la adecuada, hay otra vida y hay que luchar por ella», porque está claro que «es necesario racionalizar los horarios».
Publicidad
El tiempo en que la covid nos obligó a un cambio de vida le sirvió a Pepa Muñoz para «reflexionar» y de ello ha sacado buenas cosas. «Yo he podido aportar mucho, ayudar al sector y a muchas mujeres en este período», comentó orgullosa.
Pero no faltó una advertencia: «Estamos comiendo peor y eso tiene un coste para el medio ambiente, para la salud y para los bolsillos. Tenemos todos una gran responsabilidad, hay que asumirla y solucionar este aspecto», concluyó Sara Gómez.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.