M. F. ANTUÑA
GIJÓN.
Sábado, 17 de noviembre 2018, 04:33
Fue una gala corta. Y, pese a tener una torre de alta tensión en el escenario, no fue precisamente electrizante. Pero tuvo sus momentos. Los más aplaudidos, dos: el primero, al principio, cuando los presentadores, Santiago Alverú y Arantxa Nieto, recordaron que desde el FICX se pone el foco en Alcoa y se pide una solución. El segundo, al final, cuando el actor Juan Diego salió a escena y el público se puso en pie para aplaudirle largo y tendido.
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El Teatro Jovellanos se llenó hasta la bandera para dar el pistolezo de salida al Festival Internacional de Cine de Gijón con una gala que habría de presentar nueve días de cine, con sus películas, sus ciclos, sus premios, sus jurados y también con sus premiados. Los primeros en salir a escena fueron los merecedores del Premio de Honor del Festival, la italiana Tizza Covi y el austriaco Rainer Frimmel. Ella hizo el esfuerzo de hablar en castellano para dar las gracias y compartirlo con los actores y actrices que han trabajado en sus películas; él, en inglés, dijo que su cine ha querido mostrar un mundo en el que la solidaridad y la humanidad contribuyen a dibujar un mundo mejor.
Santiago Alverú y Arantxa Nieto fueron presentando secciones -Oficial, Rellumes, Día de Asturias..-, pases especiales, homenajes como el que recibe Eli Cortiñas y colaboraciones como la que este año se estrena con el Festival de Cine de San Sebastián, cuya subdirectora, Maialen Beloki, subió a escena para reforzar esa apuesta por trabajar en red y de la mano de otros certámenes. Otra mujer, la cineasta asturiana Carmen Menéndez, presentó el premio CIMA a la mejor película dirigida por mujeres y recordó que de las 180 películas que se verán estos nueve días en Gijón solo un tercio están firmadas por nombres femeninos. Bajar ese porcentaje es la apuesta.
Sobre el escenario del Jovellanos se entregó el premio Julio Alejandro de Guion que concede la Fundación SGAE, que fue a parar a manos del cubano Amilcar Salati, y también sobre él se dejaron ver los miembros de otros jurados, incluido el internacional que habrá decidir los premios de la Sección Oficial, en la que compiten 17 largometrajes. La cineasta Caroline Deruas, la programadora Susana Santos, la actriz Núria Prims, el productor Felipe Lage y el director artístico del Festival de Buenos Aires, Javier Porta Fouz, son quienes tienen la última palabra. De momento, ayer, fueron escuetos. Solo Núria Prims dijo algunas para declararse enamorada del FICX y con ganas de hartarse de ver cine.
Hubo más presencias -incluida la de David Lynch en un vídeo traducido por Santiago Alverú, que protagonizó una sketch de 'Twin Ficx' en el que se debía resolver el asesinato del guionista de la gala- pero una por encima del resto en aplausos y emociones. El actor Juan Diego salió a escena, recogió su premio de manos del director del FICX, Alejandro Díaz Castaño, y la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, y el público se puso en pie y a sus pies. Prácticamente sin voz, por un catarro inoportuno y mucho lío de trabajo, bromeó con el tono 'El Padrino' con el que tuvo que agradecer el Premio de Cinematografía Nacho Martínez. Recordó visitas previas al Festival de Gijón, «cuando era pequeño y yo también», cuando se dedicaba al público infantil y se desarrollaba en la Laboral. Citó también sus visitas a la ciudad por razones teatrales y las múltiples ocasiones que ha pisado estas tierras por motivos estrictamente personales y de puro disfrute, pero, sobre todo, aprovechó para recordar con inmenso cariño la figura del actor asturiano que da nombre al galardón. «Quisiera encontrar mi registro más cálido para corresponder a este premio», dijo, antes de rememorar aquellas noches madrileñas con Nacho Martínez, Juan Echanove y otros actores que acababan en su casa, leyendo poesía. «Fue una persona a quien conocí, con quien compartí un sueño y compartí la bohemia, es muy hermoso que hayan pasado los años y me den este premio», contó.
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Fue Juan Diego el protagonista absoluto de una gala en la que se auguró y se prometió una «descarga para los sentidos», se destacó la presencia de cine español y hecho en Asturias, se invitó al público a llenar las salas y, tras la cual, se proyectó la primera de las películas a concurso de la Sección Oficial, 'La favorita' de Yorgos Lanthimos.
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