Políticos con la lengua muy larga y la educación muy corta

Hasta que aprendan a usar Twitter, los políticos no pueden plantar batalla en Internet, como mucho pegarse un 'chimberazo' en el pie. Las redes sociales, tan inmediatas y efímeras, también tienen memoria y un par de tuits antiguos y desafortunados están complicando la campaña electoral a Albert Rivera. Uno lo escribió la número tres de Ciudadanos, Marta Rivera, que el año pasado dejó registrado en 140 caracteres el siguiente comentario: «Los judíos lo pasaron fatal en los campos de concentración, pero el Holocausto tiene una explicación política». Ella se ha defendido alegando que la frase se ha «sacado de contexto» y ha explicado que lo escribió en un calentón, cuando Pablo Iglesias, tras condenar el terrorismo, apostilló que tenía «una explicación política». El otro tuit no está sacado de contexto, lo escribió hace cuatro años y le ha costado la dimisión al edil de la formación naranja en Soto del Real (Madrid) Sergio Luna: «Mañana se cumple el 75 aniversario del asesinato de José Antonio Primo de Rivera. Tus valores siguen presentes. Las ideas no se fusilan».

Mal que les pese, Marta Rivera y Sergio Luna le están haciendo la 'contra campaña' al candidato de Ciudadanos, y hay políticos tan torpes que la hacen continuamente. Las salidas de tiesto, los insultos, los calentones virtuales... no solo descalifican al autor, son un bochorno para el partido y un problemón a diez días de las elecciones. «Cada tuit ofensivo es una arma arrojadiza que tienen el resto de partidos contra el tuyo, aunque quien lo haga sea el concejal de un pequeño pueblo. Cuando ese comentario llega a la prensa se convierte, aunque sea durante unas horas, en una mancha terrible que el resto de formaciones, sobre todo la afectada, puede usar, y que le permite aparecer como víctima», advierte Antoni Gutiérrez-Rubí, asesor de comunicación y consultor político.

En Ciudadanos, de momento, pierden dos a uno. El 'gol' a favor se lo ha metido en propia puerta el PP, cuando el lunes el secretario general del madrileño municipio de Galapagar, Ángel Camacho Lázaro, comentó en Twitter: «Es cosa mía, o Villacís se ha comido toda una fábrica de bollos y se está poniendo fondona». La aludida se tomó entonces la dulce revancha y publicó una foto suya zampándose un bollo, Albert Rivera se hizo un 'selfie' igual y hasta en las filas populares (Javier Maroto) le sacaron la cara a Villacís, una operación de marketing redonda. «Se trata de responder lo antes posible para aprovechar el momento de máxima visibilidad. La repercusión, en cuanto sale en prensa, suele ser muy alta, pero solo durante unas horas por eso hay que ser rápidos, como han sido Villacís y Rivera».

Aunque no haga gracia a eso de «fondona» se puede responder desde la guasa, pero la experiencia que tenemos en España es que la broma a menudo excede sus límites y campa a sus anchas por el insulto y la descalificación. Y eso resta votos. «Los pequeños escándalos ayudan a crear la percepción de que la gente de ese partido piensa así porque nunca se recuerda a quién lo hizo o el cargo que tenía». Les refrescamos la memoria con una quincena de ejemplos, con abundancia de representantes del PP, que retratan a esos políticos que no nos representan.

- El portavoz del equipo de gobierno (PP) en el Ayuntamiento de Jaén, Miguel Ángel García Anguita, dijo en el transcurso de un debate sobre el conflicto en la atención a los dependientes que mantiene el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía: «A mí me decía hace muchos años mi maestro jurídico, a la mujer y al papel hasta el culo se ha de ver». Aseguró que «en absoluto pretendía insultar ni menospreciar a nadie, y mucho menos a las mujeres» y que es «una expresión habitual en Derecho».

- «Cuando hay faldas, ¿usted sabe para qué las utilizo? Para quitarlas. Las faldas están para quitarlas, que es lo que hacen los hombres. No para esconderse debajo. Usted no sé para qué las utiliza». Así respondió el alcalde de La Guardia (Jaén), Juan Morillo (PP), a un concejal que le reprochó que se «escondía debajo de las faldas de los jueces».

- La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Linares, Ángeles Isac García dirigió a la concejal socialista Mabel Selfa el siguiente comentario: «Tiene la lengua muy larga y la falda muy corta». Un verso de una canción de Joaquín Sabina que en palabras de Linares pierde todo su carácter poético.

- El que iba a ser concejal de Cultura de Ahora Madrid Guillermo Zapata renunció al cargo tras el follón a cuenta de unas 'bromas' imperdonables en Twitter hace cuatro años, cuando no tenía responsabilidad política: «¿Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero». Se disculpó y dijo que el Holocausto le parece «deplorable y terrible» y también había hecho mofa en Twitter mencionando a la víctima del terrorismo Irene Villa y a Marta del Castillo.

- El concejal del PP en Paredes de Nava (Palencia), Jonathan Cabeza Infante, dimitió tras arremeter duramente contra el líder de Podemos, Pablo Iglesias, falta de ortografía incluida: «'Haber' si te dan un tiro en la nuca cacho cabrón y déjanos tranquilos». Pidió perdón, se declaró «arrepentido» y aseguró que se «malinterpretó» su mensaje (sic).

- «Soraya, con su carita de zorra, no es más que una mala perra casposa, sucia y ratera. No hay más que verla. No pueden soportar que hayan perdido otra vez las elecciones en Andalucía. Como ellos mismos dicen. Que se joda», escribió en Facebook Jesús Díaz Robles, jefe de área de la Diputación de Huelva (PSOE).

- Joaquín María Martínez Navarro (PP), concejal presidente de Villaverde (Madrid), a un vecino que le reprendió desde el público en un pleno y le advirtió que no dijera «tonterías»: «Como ya no soy concejal, nos vamos a ver en la calle (...) Es usted más tonto que cualquiera dormido».

- «¡Que te den! Que te den por ese culo tan magnífico, tan inconmensurable, tan mayestático que tienes...». Un mensaje con frases como esta fue publicado bajo un nick que escondía la identidad de su autor en Facebook. La destinataria era la alcaldesa de Priego (Cuenca), Azucena Redruello (PP), que denunció los hechos y atribuyó la autoría al concejal de su mismo partido Nicolás Cano.

- El alcalde de Villares del Saz (Cuenca), José Luis Valladolid Lucas (PP) llamó desde su cuenta de Facebook «puta barata podemita» a la portavoz del PSOE en Castilla-La Mancha, Cristina Maestre.

- El alcalde de Granada, José Torres Hurtado (PP) dijo en una entrega de diplomas a los mejores estudiantes de Selectividad: «Ya sabéis que las mujeres, cuanto más desnudas, más elegantes; y los hombres, cuanto más vestidos, más elegantes». Con ellos les estaba invitado a vestir «de manera informal» en la fiesta que se había organizado en su honor.

- El presidente del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, nombrado por el Gobierno del PP, dimitió tras el lógico follón que se originó con su despreciable comentario. José Manuel Castelao Bragaño dijo: «Las leyes son como las mujeres, están para violarlas».

- El concejal del Ayuntamiento de Gines (Sevilla) Romualdo Garrido (PSOE) fue condenado a pagar 160 tras insultar y amenazar a una mujer integrada en la candidatura popular mientras ésta repartía propaganda electoral por la localidad: «Me cago en tus muertos. Pilar de mierda, sinvergüenza, te vas a enterar tú y tu familia, gilipollas, hija de puta».

- El diputado autonómico por Lanzarote (PP), Sigfrid Soria, fue apartado tras decir sobre los escraches: «como un perroflauta me acose por la calle, me intimide o agreda, la hostia que se va a llevar ni se la va a creer».

- Juan Antonio Pontones, concejal de Podemos en Puerto Real (Cádiz) escribió hace cuatro años este mensaje en su Facebook: «Joder, y que ya no exista el Grapo para darle su merecido a estos cobardes franquistas... qué pena».

- El alcalde de Cartagena, José López, de Movimiento Ciudadano, llamó «cortito» a un concejal de Ciudadanos.

- A propósito de un partido entre España y Francia, Elena Valenciano, vicesecretaria general del PSOE, incendió Twitter al preguntar: «¿Habéis visto a alguien más feo que Ribery?».