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Los estadounidenses no sólo escogieron el martes a un presidente, un vicepresidente, 435 congresistas y 34 de sus 100 senadores. Millones de ciudadanos norteamericanos también se tuvieron que posicionar acerca de cuestiones como el salario mínimo, la marihuana recreativa y, sobre todo, el derecho al ... aborto, uno de los asuntos más polémicos en la agenda política del país y que se sometió al criterio de las urnas en una decena de Estados.
En siete de ellos se aprobaron propuestas que blindan el derecho de las mujeres a la interrupción voluntaria del embarazo, en algunas de ellas incluso a través de sus respectivas constituciones estatales. El aborto queda así protegido en Colorado, Nueva York, Maryland, Arizona, Misuri, Nevada y Montana. Se da la circunstancia de que en estos cuatro últimos, en la urna paralela, se impuso Donald Trump, quien se congratuló en 2022 de la derogación de este derecho por parte del Tribunal Supremo.
La moneda cayó del otro lado en los tres Estados restantes, todos ellos con victoria republicana en la contienda presidencial: Nebraska, Dakota del Sur y Florida. En este último, en el que se concentraban todos los focos por las posiciones marcadamente antiabortistas de su gobernador, Ron DeSantis, una mayoría del 57% se declaró a favor del derecho de las mujeres a decidir, pero la aprobación exigía un listón mínimo del 60%. De esta forma, se mantendrá la llamada 'ley del latido', una de las legislaciones más restrictivas del país, que no permite la interrupción del embarazo después de las primeras seis semanas de gestación. Tampoco tuvo éxito allí la enmienda que pretendía legalizar el consumo recreativo de la marihuana en mayores de 21 año: rozó el 56% de los apoyos populares, pero una vez más no alcanzó la barrera del 60%.
En California, por el contrario, los votantes sí avalaron una propuesta para eliminar de su Constitución estatal la referencia que ciñe el matrimonio únicamente a la unión entre un hombre y una mujer. La decisión llega casi una década después de que el Tribunal Supremo legalizara el matrimonio homosexual en todo el país.
Los norteamericanos de once Estados también eligieron a sus respectivos senadores. Los candidatos republicanos se alzaron con la victoria en Montana, Dakota del Norte, Misuri, Indiana, Virginia Occidental, Vermont, Utah y New Hampshire, mientras que los demócratas se impusieron en Washington, Delaware y Carolina del Norte. En este último quedó designado el actual fiscal general, Josh Stein, frente al republicano Mark Robinson, quien protagonizó una intensa polémica al autodenominarse «negro nazi» en un foro de pornografía.
También se escogieron a los gobernadores de dos territorios con diferente estatus a los 50 que componen Estados Unidos: en Samoa Americana y en Puerto Rico, este último protagonista de la campaña después de que un comediante que hacía de telonero de Trump lo definiera como «isla flotante de basura». Ganó la republicana Jenniffer González pese a la campaña en su contra de uno de sus paisanos más ilustres, el cantante Bad Bunny.
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