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Los candidatos a la Presidencia del Principado recorren estos días la región de punta a punta, se fotografían con los vecinos, ofrecen discursos e intervienen en los actos de campaña. Son la imagen del partido al que representan y, para lo bueno y para lo malo, serán quienes den la cara el próximo día 28. Sin embargo, detrás de cada uno de ellos trabajan equipos de personas que se juegan tanto o más que el candidato y que deciden por ellos desde qué visitar, qué mensajes lanzar, qué plazas evitar y qué imagen proyectar. A algún cabeza de lista, incluso, le han modificado en las ultimas semanas hasta su vestuario.
Son los gurús de la política asturiana que, en su mayoría, suelen pasar desapercibidos ante la opinión pública. Jefes de campaña, coordinadores de comités electorales o personas de máxima confianza de los líderes con capacidad para marcar sus pasos. Están en la sombra, pero buena parte del mérito o la responsabilidad de lo que pase el 28M recaerá sobre ellos.
El comité electoral que acompaña al socialista Adrián Barbón en esta carrera de fondo está coordinado por la vicesecretaria general de la FSA, Gimena Llamedo, quien asume buena parte del peso de la campaña, aunque en el equipo destacan otros perfiles con indiscutida autoridad en el partido, como la exvicesecretaria general del PSOE y diputada nacional, Adriana Lastra, y el vicepresidente del Principado, Juan Cofiño. Incluso, sin formar parte de este comité, destaca también la figura de Norma Bernard, coordinadora de programa, quien ha tratado de incorporar en la campaña nuevos formatos, como el primer 'hackathon' organizado por la FSA. «Detrás de una campaña electoral hay un trabajo enorme de decenas de personas para que todo salga bien», afirma Llamedo, quien entiende que el PSOE cuenta con la ventaja de que «tenemos presencia en todos los concejos, militantes en todos los pueblos y somos un partido con una capacidad organizativa muy importante».
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Diego Canga, candidato del PP, arrancó su camino hacia el 28M con Esther Llamazares como jefa de campaña, pero a principios de mes tomó el relevo David Mérida, para que la avilesina centrará todos sus esfuerzos en su candidatura a la Alcaldía de su ciudad. Mérida dice estar satisfecho con la precampaña e ilusionado con la campaña porque entiende que es el PP el que está marcando los mensajes, y que buena parte del debate gira en torno a la figura de Diego Canga. «El PSOE está nervioso porque ve que puede perder el Gobierno», anota Mérida, quien confiesa que lo más complicado de su trabajo es intentar complacer a todos los suyos. «Todos quieren tener a Diego Canga en su concejo», explica.
La jefa de campaña de Ciudadanos, Ana Reguero, asegura que el equipo que prepara la campaña de la formación naranja «se está dejando la piel» para que su candidato, Manuel Iñarra, sea diputado y la formación naranja «pueda influir en las decisiones que afectan a los asturianos». «Son días duros, muchas horas y con mucha intensidad. Pero todo lo que merece la pena exige esfuerzo», dice.
La situación interna de Podemos dificulta, y mucho, el reparto de responsabilidades ya que la comunicación entre la dirección del partido y el equipo de campaña de Covadonga Tomé, candidata autonómica de la formación morada, es prácticamente nula. Oficialmente no existe el cargo de jefe de campaña ni un puesto similar, pero, en la práctica, el equipo de máxima confianza que acompaña estos días a Tomé está dirigido por el exsecretario general, ahora expulsado del partido por la nueva dirección, Daniel Ripa.
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Roberto Ruiz, jefe de campaña de IU-Convocatoria por Asturias, trabaja estos días a destajo para tratar de que su cabeza de cartel, Ovidio Zapico, recorra de este a oeste toda la geografía asturiana y calcula que, sólo en la precampaña, ya habría sumado más de 5.000 kilómetros. «Hay muchos concejos que nos piden la visita de Zapico y para mí es la parte más díficil, tener que decir a algunos compañeros que no podemos estar en todos los sitios a la vez», reconoce Ruiz, quien asegura que no podría hacer frente al volumen de trabajo que genera organizar una campaña sin la ayuda de la también candidata María José Miranda. «Los salones se están quedando pequeños y hay más gente que otros años. Hay mucho optimismo», celebra.
Detrás de Adrián Pumares, candidato del Foro a la Presidencia del Principado, también hay un equipo multidisciplinar que toma decisiones consensuadas y en las que destacan las figura de José Suárez Arias-Cachero y Jaime Fernández Paíno. Mientras que Vox dice no tener una estructura orgánica regionalizada, por lo que la coordinación de la campaña la dirige desde Madrid el vicepresidente de acción política, Jorge Buxadé.
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