La plantilla de CAPSA irá a la huelga indefinida, tras el fracaso de la mediación

En el encuentro en el SASEC, al que pese al requerimiento del comité no acudió el director general, las partes se centraron en la negociación del convenio colectivo y los trabajadores dejaron de lado las reivindicaciones que han ido surgiendo desde el bloqueo del mismo, tales como la supuesta deslocalización de parte de la producción -negada por la empresa-, o las sanciones y expedientes impuestos por la compañía desde el comienzo de las protestas, así como el despido de un trabajador.

«La empresa sigue en sus trece de no ceder a ninguna de nuestras pretensiones», afirmó Urbano, que sostuvo que tienen la intención de «suprimir las condiciones del convenio». Los trabajadores, por su parte, buscan «mantener las condiciones actuales del convenio colectivo, así como arreglar las sanciones, los expedientes y el despido» y obtener una respuesta satisfactoria por parte de la empresa acerca del «traslado de parte de la producción».

Como consecuencia de la falta de acuerdo, y tal y como venía anunciando el comité de empresa durante las últimas semanas, los 700 trabajadores de la plantilla de CAPSA retomarán las movilizaciones, esta vez de forma indefinida, a partir del próximo martes, aunque mantienen la jornada de huelga de la convocatoria anterior que habían anunciado para hoy. La nueva convocatoria de huelga será discontinua, aclaró Urbano, con paros los martes, viernes y sábados.