La asamblea de trabajadores de Duro lleva al Congreso sus quejas por el ERE

La asamblea de trabajadores de Duro Felguera, formada por delegados de todas las filiales y sindicatos de la compañía, pero que actúa de forma independiente de los comités, ha llevado sus quejas hasta el Congreso de los Diputados. Diez miembros de este colectivo se desplazaron ayer a Madrid para reunirse con representantes de todos los grupos políticos que quisieran atenderles. Lo hicieron los parlamentarios de Podemos. Los asturianos Sofía Castañón y Segundo González y el canario Alberto Rodríguez brindaron su apoyo a los empleados de la compañía que atraviesa una de las situaciones más complejas de su centenaria historia.

El día anterior fue la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, quien les recibió en el Consistorio. A continuación, Susana Fernández, que actúa como una de las portavoces de este colectivo y que carece de afiliación sindical, se encargó de dar lectura a un manifiesto en el salón de recepciones. Ayer tenían previsto intervenir en el Pleno del Ayuntamiento gijonés con una declaración institucional, pero su propuesta no encontró el suficiente respaldo político al actuar de forma autónoma a los comités del grupo asturiano y a las direcciones de los sindicatos mayoritarios. Hoy mismo, los secretarios generales de la Federación de Industria de CC OO, Damián Manzano, y de UGT-FICA, Jenaro Martínez, se reunirán con el consejero de Industria, Empleo y Turismo del Principado, Isaac Pola, para abordar la situación de la empresa después de que la víspera de las vacaciones de Semana Santa su dirección anunciara la decisión de negociar un ERE que afectará a las plantillas del grupo que trabajan en DFSA, en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón, y en Madrid.

Este encuentro coincide con la finalización del plazo para formar la comisión negociadora del expediente que afectará a un número indeterminado de trabajadores, que podrían ser varios centenares. Se trataría de un ajuste que llegaría al 25% o 30% de la plantilla formada por unos 2.000 trabajadores. Los sindicatos ya tienen designados los nombres de sus dos representantes en Asturias y los otros dos de Madrid, donde no tienen comité de empresa, y hoy lo comunicarán a la dirección de Duro Felguera. A partir de entonces y en un periodo de 30 días se desarrollará el periodo consultivo para intentar llegar a un acuerdo.

La asamblea de trabajadores y los comités de Duro Felguera tienen en común su preocupación por el futuro de la plantilla de la empresa y coinciden también en culpabilizar a la anterior presidencia de la situación que atraviesa la compañía, pero difieren a la hora de evaluar la forma en la que el actual presidente, Acacio Rodríguez, está conduciendo esta crisis y la actitud de la banca acreedora.

La asamblea acusa a Rodríguez de «mentir» sobre el ERE y a los bancos de «asfixiar» al grupo, mientras que los comités dieron en su día un voto de confianza al nuevo presidente -que relevó a Ángel Antonio del Valle el pasado mes de noviembre- y saludaron el plan propuesto por la banca, dispuesta a reducir la deuda en un 85%, aportar 25 millones de euros y liberar avales por otros cien millones al 50% con la compañía. Todo ello condicionado a una ampliación de capital en la que trabaja la dirección de Duro Felguera -a través de Fidentiis y que será clave para su supervivencia.