«Estamos con los ánimos bastante altos, seguiremos dando la batalla»

La protesta pretendía ser simbólica, de hecho tan solo se repitieron dos o tres veces el cántico «la acería no se cierra» al tiempo que se lanzaban un puñado de petardos. «Los ánimos están bastante altos, aquí seguiremos», nos cuenta Xuan González, trabajador de los hornos altos, quien confiesa que no ha perdido el optimismo de cara a que esta tarde se alcance un acuerdo». «Tenemos unos puntos claros encima de la mesa para suspender los paros, están resabidos, toca ver qué nos dice la empresa», añade José luis Vázquez, trabajador de carril. En su sector, carril, buena parte de esta plantilla está en ERTE desde esta misma noche. No es su caso porque como nos explica «solo está de ERTE laminación, y zonas comunes pero en el acabado todavía hay mucho saneo y stockage».

Si ahora mismo el cierre patronal ha afectado a carril, el viernes lo hará en alambrón. De hecho, de no llegarse a una solución, los trabajadores ya tienen confirmado el ERTE desde ese mismo día. Dos de los trabajadores que se verían afectados son José María Miguélez y Alberto Rodríguez, quienes también se sumaron esta mañana a la concentración en la entrada de Veriña. «Esta situación es una imposición de la empresa, no quieren negociar y no ceder reunión tras reunión en los 23 puestos, siempre pagamos los trabajadores», dice Miguélez. «La empresa la veo sin ganas de nada, con sus objetivos muy claros», añade Rodríguez.

Hoy no había novedades que trasaldar. Nada nuevo ha pasado desde que la mediación del sábado acabase sin acuerdo y CC OO y CSI, los sindicatos convocantes, informasen ayer en asambleas a la puerta, en ese caso de Sotiello. De hecho, la cita de hoy estaba más pensada para quienes no pudieron asistir ni ayer ni a la asamblea improvisada que se organizó a las puertas del SASEC el mismo sábado. A falta de que esta tarde se pudiera desatascar el conflicto, sigue en vigor lo aprobado el domingo, continuar con las concentraciones y endurecerlas después del puente, con movilizaciones en los acceso a la fábrica gijonesa el miércoles de 7 a 9 horas.

Eduardo Llaneza, es uno de los miembros del comité que estará esta tarde en la mesa negociadora. Antes de acudir a la cita en Oviedo se acercó a Veriña. «Nosotros lo tenemos claro, ya lo dijimos el sábado, la Asamblea es soberana, mientras no se respeten los puntos que están encima de la mesa y que se decidió con los trabajadores, las huelgas no se van a desconvocar».

El sábado la siderúrgica ofreció retirar el cierre patronal, que afecta a unos 320 trabajadores -sin sueldo ni paro-, a cambio de que CSI y CC OO desconvocasen los paros de la acería, que no secundan el resto de sindicatos del comité. Movilizaciones que ahora no tienen efecto por la paralización del taller, decretada por la multinacional al considerar que existía riesgo para las instalaciones y los trabajadores. Argumenta que la acería, en la que se manejan arrabio y acero líquido a 1.700 grados, no puede sufrir paradas y arranques a lo largo del día, ya que habría un peligro de perforación en el refractario.

La reunión de esta tarde se prevé larga, de hecho, uno de los temas más comentados entre los asistentes esta mañana y que acudirán a Oviedo es cómo afrontar que se prolongue más allá de las diez de la noche, dado el toque de queda en vigor.