«En un momento en el que se está revisando en toda Europa el suministro y almacenamiento de gas, es obvio que todas las infraestructuras que puedan estar a disposición para ello deben ponerse en funcionamiento». Así lo ha asegurado hoy en Oviedo el consejero ... de Industria, Enrique Fernández, en alusión a la regasificadora de El Musel, paralizada desde su construcción a finales de 2012. El Principado, ha asegurado, lleva años reivindicando su puesta en marcha a la mayor brevedad, una vez que el pasado año se aprobó la declaración de impacto ambiental. «Somos conscientes de que la Secretaría de Estado de Energía es receptiva a este planteamiento y está tomando medidas y dialogando con Enagás para buscar una rápida solución y el desbloqueo de la parálisis actual de la planta gasista», ha asegurado.
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Las partes implicadas buscan definir qué usos va a tener dentro del sistema, ha explicado el consejero. De forma paralela, el Principado «muestra un interés continuo por el desarrollo de esas conversaciones y sobre la mesa pedimos que esa instalación, que no solo puede generar autonomía energética para Asturias, sino también actividad económica y empleo, entre en funcionamiennto de una vez por todas». Sobre estos usos, Fernández ha indicado que no le corresponde al Gobierno regional delimitarlos, pero ha subrayado que son conscientes de que «las necesidades del sistema son más imperiosas que nunca por esta crisis» provocada como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de Rusia. «Lo que quermos es que funcione», ha incidido.
Asimismo, el consejero ha señalado que esta guerra tiene un impacto enorme en los precios de la energía, «que son una locura desde hace tiempo y, por desgracia, no vemos el techo que pueden alcanzar». Ante este panorama, es «urgente» que la Unión Europea, ha indicado, «pueda establecer nuevas reglas para este mercado de substas de energía, en el que el precio del gas no afecte al de todos los suministros energéticos y podamos así ver una reducción en el precio medio de la electricidad porque obviamente esto no es sostenible». Además, el conflicto bélico ya está provocando problemas de abastecimiento a las empresas asturianas, que actualmente «no son graves», pero si se prolongan en el tiempo podrían acarrear «consecuencias no deseables». En este sentido, Fernández ha detallado que Ucranica es suministrador de grano, aceites, productos minerales y férricos« y, si las restricciones se mantienen en el tiempo, las empresas »van a tener que hacer frente a la escasez o bien a diversificaar los mercados de origen, cosas que siempre son un inconveniente y pueden generar un problema serio a algunas empresas«.
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