El Principado diseña la estrategia para captar la fábrica de BYD

«Se analizarán todas las opciones viables para conseguir captar esta inversión, sin descartar nada», explicaron ayer fuentes del Principado. Primero, apuntaron, es necesario conocer cuál es el punto de partida de la región en esta operación, en la que la competencia no es solo entre las comunidades españolas, sino entre toda Europa. De hecho, BYD decidió instalar su primera fábrica de coches en el Viejo Continente en Hungría, tras descartar a España, Alemania y Francia. Será la primera marca china en construir una fábrica de última generación en Europa que, además, contará con una línea de producción de coches avanzada.

BYD justificó esta elección porque Hungría es un «centro de transporte esencial» y por su experiencia en la industria automovilística, así como por su infraestructura madura y su base industrial, lo que ha hecho que «otros fabricantes de primer nivel» hayan elegido al país como lugar de producción de turismos. En este sentido, es cierto que Asturias es una región periférica y no tiene una amplia base de empresas dedicadas a la automoción, pero sí cuenta con tradición industrial y una siderúrgica que fabrica acero para este sector. Además, dispone de suelo suficiente y cuenta con dos puertos que facilitan el comercio exterior.

Por ello, la delegación de BYD que viajó a Asturias en 2023 puso sus ojos en la Zona de Actividades Logísticas e Industriales (ZALIA), un entorno que será todavía más adecuado a las necesidades del fabricante cuando se completen las infraestructuras pendientes para mejorar el acceso a El Musel. El director general de BYD en Europa, Michael Shu, señaló hace varios días la intención de construir una nueva factoría en suelo comunitario a lo largo de 2025, ya que su objetivo es convertirse en líder en este mercado antes de que acabe esta década. En la filial española mantienen la discreción, ya que incluso explican que se enteran de los planes de expansión cuando los comunica la empresa matriz de forma oficial. De manera que BYD España se limita a recordar que la única planta confirmada hasta el momento es la Hungría, «que entrará en funcionamiento antes de acabar 2025».

Los empresarios, por su parte, ya han emplazado al Principado a viajar a China para negociar con el fabricante en su propio territorio. Tanto la Federación Asturiana de Empresarios (Fade) como las Cámaras de Comercio instaron la pasada semana –después de que este diario adelantara que la compañía planea construir una nueva fábrica en 2025– al Gobierno regional a «coger el avión» para vender las bondades de Asturias.

Algo similar a lo que hizo en enero de este año el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que se desplazó a China para mantener reuniones con posibles inversores en su comunidad. Entre ellos, BYD, que en 2023 visitó Puertollano (Ciudad Real) para analizar las opciones de instalar allí una fábrica.